Hablarle a un asturiano sobre las predicciones meteorológicas para los próximos meses es arriesgarse a una carcajada como respuesta. Si no sabemos si va a llover esta tarde, como para atrevernos con el pronóstico para dentro de un par de semanas.

Pero hay que fiarse de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que presupone un verano tranquilo en Asturias, con promedios de temperaturas y precipitaciones dentro de lo habitual. Para más detalles, la rueda de prensa ya clásica en el inicio de las estaciones, que la Aemet ofrecerá con las líneas generales de un verano que comienza hoy a partir de las doce y siete minutos del mediodía, hora oficial de la Península.

Asturias deja atrás una primavera inestable y lluviosa, con poco sol y temperaturas que rara vez libraron del jersey y la chaqueta, cuando no del chubasquero.

El principal acontecimiento meteorológico tuvo lugar en la madrugada del lunes 11 de junio, con un diluvio sobre el área central de Asturias: 54 litros por metro cuadrado en Gijón, 43 en Oviedo, 34 en Salas y 28 en Mieres, con la acería de Avilés anegada, el campus de Viesques inundado y pérdidas aún no evaluadas en las plantaciones de faba asturiana. Desde entonces, el tiempo parece haberse estabilizado.

Los termómetros ya experimentaron una subida considerable ayer. En Ibias se alcanzaron los 28,8 grados, y en Pola de Somiedo el tope térmico fue de 28,5. Hubo calor en el Suroccidente, con los 27,7 grados de máxima en Degaña. En Pola de Somiedo se registró la mínima del día en Asturias, con casi once grados.

El adelanto de previsiones para lo que queda de junio y los meses de julio y agosto señala que bajará algo la temperatura en Canarias en relación con la media de los últimos años, y subirá muy ligeramente en el tercio noreste de la Península. En cuestión de precipitaciones, el verano será algo más seco en el noreste. La frontera la marca precisamente el límite entre Asturias y Cantabria.

Tomando los datos estadísticos entre 1981 y 2010, que son los que maneja la Aemet para algunas de sus estadísticas, Asturias tiene una temperatura media en torno a los 18 grados (la más baja de España por autonomías), y una precipitación, según zona, entre los 107 y los 180 litros por metro cuadrado.

Al margen de pronósticos, conviene no olvidar que durante los 93 días y 15 horas que durará el verano de 2018 en el hemisferio norte, en Asturias tendremos unos cuantos días en los que saldrá el sol, se nublará más tarde, lloviznará un poco después, refrescará y permitirá dormir a pierna suelta. A veces la diversidad saca de quicio, pero en otras latitudes (Trujillo registró ayer 39,2 grados) el clima de Asturias se ve como una bendición.