No por manido deja de ser cierto: al mal tiempo hay que ponerle buena cara. Por eso ayer, cerca de doscientas personas se reunieron delante del Ayuntamiento de Lena para reclamar inversiones y un plan de futuro "serio" para la estación de Valgrande-Pajares. Lo hicieron con gorros de Papá Noel de color naranja, que ya se ha convertido en el color oficial de la reivindicación, y brindado por un complejo invernal que tiene que recuperar su esplendor "sí o sí". A la cita no faltó nadie. Ni representación institucional, ni portavoces de la hostelería, ni usuarios cabreados. La imagen más emotiva: la de Ángel González de Lena, "Gelito" -uno de los "Galgos de Pajares"-, que acudió en silla de ruedas y con una manta.

"¿Qué me va a parecer lo que pasa con Valgrande-Pajares? Pues una vergüenza". Alto y claro. El "Galgo" aseguró que "me entran ganas de llorar si pienso en Chus Valgrande (impulsor de la estación) cuando veo una cosa de estas". "Una cosa", aclaró, como el retraso en la revisión del telesilla del Brañillín que este año demoró la apertura de la temporada en Pajares. La mecha que encendió una polémica cada día más acalorada. "Tienen la estación muy descuidada, no se lo merecen ni los que van ahora ni los que estuvimos antes. Todos los que pusimos ahí tanta vida y tantas ilusiones".

"Gelito", en su juventud, llevó el nombre de Pajares por toda Europa. Cada vez que competía, decía que era de "un pueblín" en el que se calzaron los esquíes por primera vez para sortear la nieve que cubría la carretera. Y de ahí, gracias al impulso de un grupo que encabezaba Chus Valgrande, nació la estación. Era el año 1954.

Demasiada historia, afirmó "Gelito", para dejar que se pierda: "No podemos permitir que lo echen todo a tomar vientos, no están mirando por la estación. Seguiré defendiendo esto hasta que ya no pueda".

Tiene el relevo asegurado. La concentración de ayer fue muy numerosa. "Somos un grupo de personas que nos unimos de forma espontánea, movidos por lo que está ocurriendo en Pajares, para que nadie se olvide de lo que es la estación y de todo lo que representa", afirmó Alfonso González de Lena, miembro del colectivo. Las mejoras en el complejo son necesarias, pero llama a no generar alarmismo: "No es que la estación vaya a cerrar en dos días. Pero es cierto que necesitamos inversiones hoy para asegurar que tendrá un mañana". Eso sí, dejaron claro que están dispuestos a convocar movilizaciones si no reciben respuesta.

El Gobierno regional convocó hace unos días una mesa de trabajo a la que acudió la alcaldesa de Lena, Gema Álvarez. La responsable municipal afirmó ayer que de nada servirán ahora los compromisos vacíos.

"Desde el Ayuntamiento, reclamamos inversiones reales. Porque esas inversiones no serán solo para la estación, son para toda Asturias", afirmó la dirigente local. Y pide que no haya más demoras en los trámites para trazar un mapa a seguir con los recursos económicos como guía: "Tenemos que ponernos a trabajar ya y aportar soluciones que aseguren al cien por cien su futuro". Junto a ella estuvieron otros concejales del gobierno local, además de representantes del PP, Ciudadanos en la comarca del Caudal, Podemos y PSOE.

Y para que todo funcione, hay otra pieza que no puede faltar: los hosteleros. Luis Núñez, presidente de "Asturcentral", afirmó que Pajares "puede ser un motor económico para el concejo y para Asturias, eso lo tenemos todos claro". Y más allá de lo económico, también pesa la emoción: "Puede ser una ilusión, un futuro, para nuestros hijos y nuestros nietos. Puede ser la herramienta perfecta para frenar el despoblamiento".

Deseos de los que tanto sufren por un complejo invernal que hizo historia. Pablo Vallina leyó un manifiesto y, al término del encuentro, brindaron todos. No soltaron la pancarta: "Inversiones ya", rezaba.