Nueva polémica con el servicio de cementerios en Langreo: a juicio un encargado por un accidente que obligó a amputar una falange a una trabajadora

Más madera para la polémica situación que vivió durante años el área de cementerios en el Ayuntamiento de Langreo. La Fiscalía del Principado pide hasta 18 meses de prisión y el pago de unas indemnizaciones que suman 34.731,3 euros para la persona que en 2019 era la "encargada" de este servicio. La acusa de un delito contra los derechos de los trabajadores y de un delito de lesiones por imprudencia grave, derivado de un accidente laboral sufrido por una de las trabajadoras del área. De las indemnizaciones tendría que responder el seguro del Ayuntamiento de Langreo. El año pasado, los tribunales ya condenaron a un trabajador del servicio de cementerios por acoso a una compañera.

El suceso se produjo el 26 de abril de 2019. Según explica la Fiscalía en su escrito de acusación, el acusado era entonces "el encargado de cementerios" y tenía entre sus funciones las de "ordenar y comprobar que se adoptasen las medidas de seguridad necesarias", además de tomar medidas preventivas en cuestiones como la "manipulación de cargas", las "caídas a distinto nivel" o el "riesgo de atrapamiento en la manipulación de lápidas". Según estas medidas previas, ningún operario debería "sobrepasar los 25 kilos de carga por persona, si es varón, o los 15", si es mujer". Pese a estas especificaciones, el Ministerio Público sostiene que el acusado mandó a tres operarios, un hombre y una mujer, la tarea de "exhumar restos y voltear manualmente una lápida" en el cementerio de Riaño. Solo la lápida pesaba 140 kilos, "la maniobra implicaba situar las piernas por debajo" y no se había comprobado "la estabilidad de la superficie". Así, "puso en riesgo la integridad física de tres trabajadores", ya que en la operación se derrumbó "la superficie de trabajo, que resultó ser un falso suelo no apto para soportar su peso". Dos de ellos cayeron "al interior de la tumba". La lápida, además, atrapó la mano derecha de la trabajadora. De 39 años de edad, sufrió "aplastamiento de quinto dedo de la mano derecha, para cuya curación requirió intervención quirúrgica" con amputación "de la falange distal". Tardó en curar 213 días. Como secuelas le quedaron la amputación "y el perjuicio estético moderado consecuencia de la misma".

Según la Fiscalía, la actitud del encargado de cementerios es constitutiva de dos delitos. El primero, "contra los derechos de los trabajadores", por el que pide 9 meses de prisión, además de 9 meses de multa con una cuota diaria de 8 euros (unos 2.160 euros). El segundo delito sería el de "lesiones por imprudencia grave", por el que se solicitan otros 9 meses de prisión.

En concepto de responsabilidad civil se le exige el pago de 11.461,53 euros por los 213 días de curación; 1.000 euros por el "perjuicio personal por intervención quirúrgica"; 9.772,05 euros por "la secuela de la pérdida de falange distal" y otros 12.497,72 euros por "la secuela de perjuicio estético moderado". También pide la Fiscalía indemnizar al Sespa (Servicio de Salud del Principado de Asturias) con "la cantidad que determine por los gastos médicos".

El juicio se celebrará este miércoles, 17 de enero, en el Juzgado de lo Penal de Langreo. Habrá sesiones también los días 18 y 19.

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