Así vivieron seis japoneses en Oviedo el triunfo de su selección ante España

Los japoneses que juegan en la cantera del Oviedo sufrieron con la gesta nipona y acabaron felices y confiados en que su selección gane el Mundial

Los japoneses de la cantera del Oviedo, ayer viendo el partido de Japón contra España. | Fernando Rodríguez

Los japoneses de la cantera del Oviedo, ayer viendo el partido de Japón contra España. | Fernando Rodríguez

Xuan Fernández

Xuan Fernández

Sus compañeros hablan de ellos así: "Son super ordenados, parecen de otro mundo. Son los que tienen la habitación más limpia de toda la residencia". Desde ayer también son los asiáticos más felices de todo el Principado. Gritaron poco –son discretos y bastante tímidos–, pero coincidían: "¡Japón va a llegar a la final!". Y es que la globalización provoca escenas pintorescas. Se vio ayer en una habitación de la residencia Fundoma en Oviedo, el antiguo orfanato minero que ahora utiliza la fundación del Real Oviedo para traer jugadores extranjeros, donde se sufrió de lo lindo para acabar festejando. Tuvieron que aguantar algún vacile durante el Japón-España.

Por la izquierda, sentados, Sora Masuda, Masatora, Hakuto Koyama y Rui Kato. Echado, Narimasa Hayatsu, ayer, en Fundoma. | Fernando Rodríguez

Por la izquierda, sentados, Sora Masuda, Masatora, Hakuto Koyama y Rui Kato. Echado, Narimasa Hayatsu, ayer, en Fundoma. | Fernando Rodríguez

–Sakamoto, vaya palos que dais los japoneses.

En la sala había panameños, chilenos, algún ucraniano, ingleses… Y luego estaban ellos, un coqueto grupo de seis japoneses que no hablan ni papa de español. Ni hacía falta ayer.

"Esto lo vamos a ganar, tenemos equipazo", decía Narimasa Hayatsu, prometedor extremo japonés nacido en 2009 que está en la cantera del Oviedo durante este curso. Y lo decía con 0-1 y gol de Morata.

Él, repanchigado, era el más calmado entre toda la tropa. Masatora Shiraishi, de 12 años, era el más nervioso. "¡Cuidado!", decía en japonés en cada ataque de España. Narimasa, Masatora, Hakuto Koyama, Rui Kato, Yuki Sakamoto y Sora Masuda. Esos son los nipones que más disfrutaron ayer. Normal: su selección ha ganado ya a dos campeonas del Mundo, España y Alemania, y se clasificó como primera de grupo tras remontar a los de Luis Enrique. Japón y su reducto asturiano ya esperan a Croacia. Y si el combinado asiático cae eliminado los seis tienen claro con quien van: "Con España", coinciden. Los seis nipones azules no se conocían de nada y se hicieron amigos en Oviedo. Van al colegio por la mañana –se reparten entre el Pando y el Pablo Miaja– y por la tarde entrenan en la cantera del Oviedo. Estarán en Asturias hasta junio. "Me encanta Oviedo, me llaman la atención sus farolas y nos tratan fenomenal", asegura Hayatsu. "Todos tienen muy buenas condiciones, están progresando mucho y valoran mucho estar aquí en Oviedo", asegura Iván Palacios, encargado del área internacional del Oviedo, que vio ayer parte del Japón-España con los chavales.

"Estuvieron todo el día diciendo que nos iban a ganar". Y así acabó siendo. La primera parte la vieron sentados en un sofá. La segunda les pilló con la cena, pero llegaron de sobra para disfrutar de una remontada nipona que pasará a la historia de Japón y fue muy celebrada en todo el país asiático, pero también en un pequeño rincón de la capital asturiana. Ya les espera Modric.

Suscríbete para seguir leyendo