Otra historia local

La primera esquela

Una tradición en la prensa escrita que se inició en octubre

Luis Miguel Piñera

Luis Miguel Piñera

de 1878

Las esquelas en los periódicos son anuncios de una muerte: son anuncios pagados. Naturalmente, desde sus inicios la prensa gijonesa se hizo eco de las defunciones del día mediante notas necrológicas. Pero si entendemos la esquela como el típico anuncio rectangular o cuadrado –pagado, y por tanto no accesible a toda la población– podemos decir que el diario "El Comercio" insertó la primera esquela al mes siguiente de su primer número: el 1 de octubre de 1878. Curiosamente era un "cabo de año" en la iglesia de San Pedro de una mujer llamada Carmen Buján fallecida el año anterior. En "El Noroeste" la primera esquela fue la del vicecónsul inglés en Gijón, Felipe Walsh. Fue enterrado en el cementerio católico (la esquela llevaba una cruz) pero unos años antes Walsh había pedido en nombre de la comunidad extranjera en Gijón que la parcela protestante de El Sucu se aumentara.

El diario "La Prensa" publicó su primer número el 1 de junio de 1921 y ese mismo día –además en la primera plana– ya vemos una esquela, pero, como en el caso de "El Comercio", fue una de un primer aniversario. Es la de Juan González Posada y Pola. La primera esquela del diario "CNT" aparece el 6 de enero de 1937 (el primer número es de una semana antes, en plena Guerra Civil) fue sin cruz y el nombre que vemos es el de Carmina Abadín. El diario socialista "Avance" publicó el número 1 el mismo día que "CNT". En el número 2 ya vemos las dos primeras esquelas: de dos hombres residentes en Porceyo y Somió. Las dos sin cruz.

Por su parte, la "Hoja del Lunes de Gijón" vio la luz el 2 de mayo de 1949 y ese mismo día se publicó la primera: la de un exjugador del Hispania Club de Fútbol del Llano de nombre José Ramón Peteiro. La primera esquela en la prensa local que ocupa toda la primera plana la publicó "El Noroeste", el 12 de julio de 1897. Es la de "Adelaida S. Cifuentes, viuda de Valdés Hevia". Luego esas esquelas ocupando toda la página 1 no fueron raras.

Suscríbete para seguir leyendo