El fuego también arrasó las fiestas de Muñás de Abajo

"Lo suspendimos todo, no parecía lógico seguir adelante cuando muchos de nuestros vecinos estaban atravesando una situación tan dura", aseguran los organizadores de los festejos de la parroquia valdesana

Celebración de una de las verbenas de las fiestas de Muñás de Abajo en una edición anterior.

Celebración de una de las verbenas de las fiestas de Muñás de Abajo en una edición anterior. / Reproducción de D. Á.

D. Álvarez

Muñás de Abajo, en Valdés, esperaba con ilusión la llegada del primer fin de semana de abril para volver a celebrar sus fiestas de San José después del parón obligado por la pandemia. Sin embargo, la oleada de incendios que afectó al municipio y a toda la región motivó que la comisión organizadora suspendiera la cita festiva que inaugura el calendario anual de festejos en el concejo.

El jueves pasado todo estaba preparado en el pueblo para la celebración. La carpa instalada, los generadores ubicados...Sin embargo, a medida que pasaba la tarde el fuego avanzaba cada vez más. La situación comenzó a complicarse en pocas horas, poniendo en jaque a numerosos pueblos cercanos a Muñás. "Las llamas se quedaron a tan solo dos kilómetros y medio, en Brieves, y estuvieron muy cerca de llegar aquí”, describe José Manuel Peláez, miembro de la comisión.

Aunque el fuego no afectó directamente a Muñás, ese mismo jueves la comisión tuvo claro que no era el momento de celebrar una fiesta. "No nos parecía ético seguir adelante y tampoco los ánimos estaban para celebraciones", señala Peláez. Así que decidieron suspender todo el programa, con los gastos que eso les iba a ocasionar.

La fiesta comenzaba el viernes 31 de marzo de con el reparto del bollo, para lo que tenían vendidos 750 vales. A continuación, estaba prevista la verbena a cargo de la orquesta "Tekila" y del grupo "Ideas". El sábado 1 de abril era el "día grande", con misa y procesión, a mediodía, y la verbena amenizada por "Beatriz" e "Ideas".

"No sabemos el gasto que nos supondrá. Nos hemos comprometido con las orquestas a buscar otro día para ellos, porque también perdieron mucho con la pandemia", avanza Pelaéz, quien asegura que la decisión de cancelar contó con el apoyo tanto de los vecinos como de los proveedores. Una comprensión que agradece. "Todos entendieron la situación y nuestra decisión, colaborando de forma excepcional pese a las pérdidas para ellos también", señala el miembro de la comisión.

El propio Peláez recuerdas que el viernes estuvieron las carreteras cortadas durante toda la mañana y que no se tenía nada claro cómo sería la evolución de los incendios, por lo que se reafirmaron en la decisión tomada cuando las llamas llegaron a las mismas puertas de Muñás la tarde anterior. Pero, sobre todo, insiste en que "no nos parecía lógico seguir adelante cuando muchos de nuestros vecinos estaban atravesando una situación muy dura". Además, subraya que los ganaderos de Muñás de Abajo "habían estado ayudando a salvar pueblos con sus cubas y la gente se encontraba agotada después de estar sin descanso toda la noche".

"Después de tres años sin fiesta parece un poco de mala suerte, pero lo malo no es que se suspendiera San José, sino todo lo que supusieron los incendios", reconoce José Manuel Peláez, quien señala que el paisaje en la zona es desolador. “El 50 por ciento de la masa forestal del concejo está quemada. Eso lo dice todo, ya que supone pérdida económica, ecológica y también para el turismo. Se quemaron casas, pero por suerte no hay que lamentar víctimas", afirma el vecino con pesar.