"’¿De dónde saliste?’, me preguntaban por mi forma de hablar", recuerda Benito Mingón al recoger el premio de la Sumana de las L.letras Asturianas de Cangas

El vecino de Sonande recibe el calor del pueblo y del Ayuntamiento por ser "un referente" en la conservación de la cultura y tradición asturianas

Benito Mingón, en Sonande, durante el homenaje.

Benito Mingón, en Sonande, durante el homenaje. / R. A. S.

Ana M. Serrano

Ana M. Serrano

Con madreñas y boina se presentó Benito Mingón en el centro de su pueblo, en Sonande, donde el Ayuntamiento de Cangas del Narcea le rindió un homenaje para cerrar la Sumana de las L.letras Asturianas «por llevar nuestra cultura allá donde va y, especialmente, nuestro idioma». 

Mingón recogió el premio, entregado a media mañana, con mucha ilusión. A primera hora de la mañana, contó más tarde, «vi a los vecinos limpiar por el pueblo para el acto y solo eso ya me h izo muy feliz». Mingón es conocido por su utilizar el asturiano «como me enseñaron». Si cuenta si h historia, empieza por decir que es un apersona «humilde», «un campesino, que no un ganadero» que se preocupa por sus raíces. Y es campesino «porque aprovecho todo lo que me da tierra, pero sin pasarme», dice. Era «un crío» (hoy tiene 55 años) cuando su forma de hablar «parecía que sonaba rara». En realidad, «yo solo hablaba lo que me enseñaron mis padres y abuelos», recuerda. Con el paso del tiempo, su interés por su cultura creció. No le hizo falta leer manuales ni estudiar, «con practicar tu asturiano y contar de tu mundo, vale». Así fue como Benito Mingón, que estudió el oficio de carpintero en la escuela de oficios, se hizo con el calor del pueblo cangués. 

Fue la técnica del Servicio de Normalización Llingüística de Cangas del Narcea, Mónica Rodríguez, quien propuso al campesino de Sonande para el galardón. «Me parecía el candidato perfecto porque es una personas que dignifica el uso del asturiano, es un referente». ¿Cómo lo hace? «Es fácil, hablando siempre su lengua, esté en un acto público o familiar». Benito Mingón contó que lo pasó mal cuando de niño en el colegio otros compañeros y adultos le reprendían por «ser asturiano». «’¿De dónde saliste?’, me preguntaban». Pero él no rindió pese a la presión. «A mí me gusta hablar así, como me enseñaron», insiste y además él creo que es una forma de recordar a sus antepasados y su cultura. «Hay que saber de dónde viene uno», dice. 

Benito Mingón recibe el galardón de la mano del concejal del Medio Rural, Ángel Menéndez, y la concejala de Cultura, Tania Rodríguez.

Benito Mingón recibe el galardón de la mano del concejal del Medio Rural, Ángel Menéndez, y la concejala de Cultura, Tania Rodríguez. / R. A. S.

Benito Mingón cree que ahora «se está perdiendo todo» y asegura que en muchos lugares de Cangas del Narcea ya no entienden lo que dice. «Es una pena, por eso ahora es más necesario que nunca que hagamos esto que hago yo, recordar y cuidar lo que es nuestro», apunta.

Gracias al homenaje ha redescubierto el cariño del pueblo. «La xente muito bien», dice si se le pregunta por el público que aplaudió la entrega del premio y sus palabras. Benito

Mingón tiene 55 años y asegura que seguirá llevando su cultura allá donde vaya. Es un viejo conocido en las ferias ganaderas y la concejala de Cultura, Tania Rodríguez, agradece que siempre que sale del pueblo o de Cangas del Narcea tenga palabras bonitas y habla promoción especial de su tierra. «Es un paisano que lleva la tradición y cultura de nuestros pueblos con orgullo», señala.

El homenaje puso punto y final a la XV Sumana de las L.letras Asturianas. Más el acto y la entrega de las regalos, entre ellos unas madreñas hechas por dos niños de Sonande «que me hicieron muita ilusión», hubo comida y música. «No se puede pedir más», opinó Mingón, quien atiende a 45 vacas y 13 toros, «lo que puedo mantener», que viven en libertad en muchas praderas y montes.