Opinión

Enrique Macián Cardete

Energía nuclear

Un debate fundamental para la economía

La Comunidad Europea ha decidido aceptar la energía nuclear y el gas natural como energías verdes. Dos corrientes de opinión, a favor y en contra, afloran en la sociedad. Existe un cierto temor a los riesgos de la energía nuclear. Pero, fuera de ella, ocurren graves accidentes cada día. Unos pocos ejemplos en España.

Camping de Los Alfaques (Tarragona), 11/7/1978. Una cisterna conteniendo propileno licuado explota por sobrepresión en la carretera nacional a su paso por Alcanar. Metros más abajo, dirección al mar, está el camping de Los Alfaques. Una ola de fuego descendente arrasa la vida de 243 personas. Más de 300 heridos con quemaduras muy graves, largas hospitalizaciones y secuelas para toda la vida.

Rotura del embalse de Tous (Valencia), octubre 1987. Rotura de la presa de Tous, 16.000 m3/seg aguas abajo causan más de 30 muertes, cientos de millones de perdidas en núcleos urbanos, propiedades rústicas y redes viarias (incluyendo actos de pillaje en viviendas y negocios, entre la vorágine del caos).

Camping de Biescas (Huesca), 7/8/1996. La crecida súbita del torrente de Aras arrasa el camping las Nieves, un kilómetro aguas abajo de Biescas, en Huesca, produce 87 víctimas, 27 de ellas niños. Desaparecieron familias enteras, dos ciudadanos franceses y cuatro de nacionalidad holandesa.

Accidentes domésticos. España registra cada año más fallecimientos por accidentes domésticos que víctimas de tráfico. Unas 30 personas mueren diariamente (más de 10.000 al año) según la Fundación Mapfre. La cocina y los cuartos de baño son los lugares de mayor riesgo dentro de la vivienda. ¿Construiremos viviendas sin cocina y sin cuartos de baño? Evidentemente, no. El análisis de los riesgos asociados a cada uno de estos desgraciados eventos permitió aplicar medidas preventivas para evitar futuros accidentes similares.

Energía nuclear. La tecnología nuclear salva millones de vidas cada año en el mundo. Se administran unos 3.600 millones de exámenes de diagnostico radiológico, unos 40 millones de tratamientos de medicina nuclear y más de siete millones de tratamientos de radioterapia. Desde el inicio de la operación de la primera central nuclear en España (Zorita 1969), han habido cero fallecimientos por radiación nuclear.

Actualmente existen en el mundo cerca de 450 reactores en operación (96 en Estados Unidos, 58 en Francia, 47 en China, 38 en Rusia, a pesar de Chernóbil, 33 en Japón, a pesar de Fukushima, 22 en India, etcétera; y siete en España). Aproximadamente hay otros 500 entre construcción, planeados y propuestos. Más de 40 países involucrados en total.

Las centrales nucleares aportan actualmente alrededor del 23% del total de la energía eléctrica en España y operan un 90% del tiempo. Junto a las centrales que usan gas, suman cerca del 50% de la energía eléctrica del país ¿se puede prescindir de ellas a corto–medio plazo? Entonces, ¿de dónde proviene la aversión y mala prensa de las centrales nucleares?

Estimo que del temor a una explosión como una bomba atómica, los accidentes de Chernóbil y Fukushima y el tratamiento/almacenamiento de los residuos.

Los reactores nucleares operan por fisión de los núcleos de Uranio, que se dividen por el choque con neutrones. El Uranio (U) natural tiene dos componentes/isotopos: Uranio-238 (99,3%) y Uranio-235 (0,7%).

El funcionamiento del reactor requiere que el Uranio-235, el que fisiona, sea enriquecido hasta cerca del 5% desde el 0,7%. Una bomba atómica requiere un enriquecimiento mínimo de U-235 de un 90% frente al 5% de una central. Por tanto, una central nuclear no es una bomba atómica.

El accidente de Chernóbil, 26/4/1986. Antigua Unión Soviética. Reactor diseñado originalmente para producir Plutonio a partir del Uranio y con el que fabricar bombas atómicas. Después, se abandona la idea y se utiliza para realizar experimentos. El reactor es de un tipo intrínsecamente inseguro, diferente a la mayoría de los existentes en el mundo. Situado dentro de un edificio industrial sin capacidad de contención ante accidentes, en lugar de un robusto edificio de hormigón armado que evite la emisión de material radiactivo al exterior.

Los operarios carecen de formación específica, ignoran la seguridad de los procesos necesaria para operar este tipo de instalaciones. Uno de los experimentos consistía en comprobar la capacidad de enfriar el núcleo del reactor si se perdía el suministro eléctrico exterior, sin un plan B. Se produce una secuencia de fallos, inexplicables aquí dada la brevedad del articulo, que provoca un gran incendio seguido de una explosión (probablemente de vapor) que causa dos muertos. “La zona de exclusión radiactiva es una de las mayores reservas naturales de Europa. Al contrario de lo que dicta la lógica, son pocos los efectos que ha tenido la radiactividad sobre la fauna de Chernóbil”. Son palabras recientes de Germán Orizaola (Universidad Oviedo), biólogo, investigador y experto en fauna de Chernóbil.

Accidente de Fukushima, 1/3/2011. Japón. Un terremoto de magnitud 9 frente a la costa y posterior tsunami, arrasó la vida de unas 20.000 personas y afectó a los tres reactores en funcionamiento de la central. Pararon (según previsto en el diseño). Arrancaron los generadores diesel de emergencia al fallar la red eléctrica, aunque luego se inundaron por el tsunami y dejaron de funcionar. Se perdió la capacidad de refrigerar los reactores y se produjo un grave accidente nuclear. Se evacuaron 100.000 personas, aunque estudios posteriores concluyeron que la evacuación fue innecesaria en la mayoría de las zonas. Las conclusiones publicadas por el Comité Científico de Naciones Unidas sobre Efectos de la Radiación Atómica (UNSCEAR)- 2015, señalan que ninguna persona sufrió lesiones agudas por radiación ionizante y no se produjeron muertes por radiactividad ni entre los trabajadores, ni entre el publico. Consecuencia de estos accidentes se crearon una serie de organismos y regulaciones internacionales que hacen prácticamente imposible que se repitan eventos como este.

Residuos radiactivos. En España, los residuos radiactivos de baja/media actividad provenientes de la medicina y la industria, se almacenan en El Cabril (Córdoba). Actualmente en Francia almacenamos residuos de centrales nucleares por los que pagamos unos 75.000 euros diarios. En Suecia están trabajando en un proyecto subterráneo en Forsmark, donde aislar los residuos durante nada menos que 100.000 años.

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