Cita en casa de Adriana Lastra: Barbón, Bolaños y un pacto a la mesa

Una comida doméstica para elevar la interlocución con Moncloa y preparar la vuelta de la riosellana

Vicente Montes

Vicente Montes

Ocurrió el viernes, antes del mitin del PSOE en Gijón. El lugar elegido fue doméstico y familiar: la casa de la diputada asturiana (exvicesecretaria general del PSOE) Adriana Lastra. Los invitados: el presidente y líder socialista asturiano, Adrián Barbón, y el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. La cita seguramente dio pie a presentaciones (la de Alejandro, el hijo de Adriana Lastra, nacido el pasado 1 de diciembre), pero la razón de fondo de la charla de mesa y mantel fue otra, remarcar la posición exigente del PSOE asturiano en los asuntos relativos a la región y canalizar vías de interlocución en el Gobierno de Sánchez, otra vez con Lastra como eje de comunicación.

Félix Bolaños tiene uno de esos ministerios que pocas veces están sometidos a la actualidad pero por el que pasan las decisiones estratégicas del gobierno de Pedro Sánchez. Es una de las personas de la máxima confianza de Sánchez, y ya trabajaba en la fontanería (término utilizado en política para referirse a las "cañerías" de las decisiones políticas, aquellas que ocurren en la trastienda, que propician acuerdos y desencuentros, u orientan estrategias de cara a la opinión pública). Ya en la época de Iván Redondo, aquel asesor de estrategias de Sánchez que acabó orillado, Bolaños, que fue jefe de la Asesoría Jurídica del Banco de España, era conocido por su minuciosidad.

¿De qué hablaron Barbón, Bolaños y Lastra entre bocado y bocado? Básicamente del engrase de las relaciones entre el PSOE asturiano y el Gobierno de Barbón con el Ejecutivo de Sánchez. La buena relación entre Adriana Lastra y Félix Bolaños viene de lejos. Después de la crisis de Gobierno que hizo salir por la ventana al exministro Ábalos y sacó del Ejecutivo a Carmen Calvo, tanto Lastra como Bolaños crecieron en poder interno. Ambos formaban un tándem reconocido en los mentideros socialistas, como el principal eje de confianza de Sánchez. Pero la dimisión de Adriana Lastra (motivada por su embarazo de riesgo y a la par que el estrepitoso fracaso de las elecciones andaluzas) puso en el punto de mira a Bolaños quien, sin embargo, ha continuado en los ajustes finos de Moncloa. Si alguien tiene hilo directo e influencia con Sánchez es él.

La comida en casa de Adriana Lastra no pudo evitar pasar por asuntos recientes que han estado de actualidad, como el enfrentamiento con el Gobierno central por el "Fevemocho". Barbón ha expresado internamente que cabe la defensa de los intereses de su Gobierno para con Asturias y la lealtad hacia el Ejecutivo de Sánchez. De hecho, Barbón únicamente ha discrepado en cuestiones vinculadas a Asturias. Recientemente las enumeró en la Junta General: el sistema de financiación autonómica, la protección del lobo, la exigencia de devolución del IVA en 2017 o la decisión de que la industria se mantuviese abierta durante el confinamiento. También ha apremiado al Ejecutivo de Sánchez en materias que urgían a Asturias, como la financiación para el proyecto de Arcelor. Únicamente Barbón ha expresado su opinión sobre dos temas nacionales espinosos: la supresión del delito de malversación o las consecuencias de la ley del "solo sí es sí" y siempre amparándose en cuestiones jurídicas.

El encuentro hace que la mirada se pose de nuevo sobre Adriana Lastra, discretamente desaparecida del panorama político los últimos meses por su maternidad. Hay algunos sectores del PSOE que se espantan ante su regreso a la vida pública. No hay que olvidar tampoco el modo en que el secretario de organización del PSOE federal, Santos Cerdán (cuyas relaciones con Adriana Lastra no eran especialmente buenas) recibió el anuncio de Barbón de que la riosellana será la candidata al Congreso en las próximas generales. "Evidentemente es extemporáneo, ahora no se está eligiendo eso, estamos en primarias municipales", dijo entonces Cerdán, aunque luego apuntó que "es una decisión del propio partido de Asturias que nosotros respetamos y encantados, además, de tener otra vez a nuestra compañera Adriana Lastra en el Congreso".

Pues eso será pronto. Adriana Lastra se reincorporará a su escaño en próximas semanas y la pretensión es que encabece la lista de las generales. Queda recorrido para entonces, y quizás algunos sectores del PSOE porfíen contra ello, pero el escenario entonces no será el actual, sino el posterior a unas elecciones autonómicas en las que se medirá el desgaste de cada territorio.

Barbón es consciente de los rumores y suele frenar su propagación con anuncios. Ayer mismo refirió que la número dos de su lista autonómica será una mujer, sí, pero del ámbito de la empresa, la sanidad o la cultura. Indirectamente era una forma de cercenar los cuchicheos sobre que el regreso político de Adriana Lastra se ciñese al terreno regional. La comida del viernes constata que la que fue número 2 del PSOE de Sánchez prepara el regreso y conecta sus alianzas.

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