El Principado licita por más de 600.000 euros la obra del nuevo intercambiador de autobuses en Llamaquique

Oviedo contará en los próximos meses con dos nuevos intercambiadores de autobuses. Al nuevo espacio de espera que el Principado quiere instalar en los aledaños del HUCA, se sumará otra gran marquesina en Llamaquique, que tiene el objetivo de mejorar la experiencia de los viajeros y adaptarse mejor «a una zona muy concurrida». La Consejería de Fomento, Cooperación Local y Prevención de Incendios lanzó ayer la licitación de las obras por 607.281,56 euros. Los trabajos tienen una duración prevista de siete meses y las empresas interesadas en realizarlos cuentan con menos de un mes de plazo para presentar sus ofertas: el 14 de febrero es la fecha límite que ha marcado el Principado.

La nueva marquesina estará ubicada en un punto que Fomento considera estratégico, ya que allí confluyen las sedes de varias administraciones regionales, los juzgados,  el instituto Aramo, la estación de tren de Llamaquique y algunas facultades de la Universidad de Oviedo como Magisterio o Geología. Precisamente, al lado de esta última, en la calle Antonio Suárez, se ubicará el intercambiador. Estará en frente del Edificio de Servicios Múltiples del Principado, en el mismo emplazamiento que tiene la marquesina actual, un espacio que se encuentra en su totalidad sobre un aparcamiento soterrado. A su alrededor hay también varias zonas destinadas al estacionamiento de bicicletas y una parada de taxis.

Además de la línea de autobús urbano «A», que tiene su cabecera en Llamaquique, numerosos autobuses interurbanos, escolares y destinados a otros viajes hacen parada en la dársena de la calle Antonio Suárez. Para todos estos servicios hay una única marquesina, en la que a duras penas caben cinco personas sentadas. El resto de viajeros debía esperar al raso el autobús o resguardarse en algún soportal adyacente. Por ello, el nuevo intercambiador plantea una marquesina de mayor tamaño. Se ofrecerá a los viajeros un espacio de 145 metros cuadrados, dividido en cuatro módulos de 10 por 4,5 metros de ancho. Debido a estas dimensiones, la nueva marquesina ocupará parte de la zona verde adyacente a la actual. 

La financiación de la obra, al igual que la del HUCA, se realizará gracias a fondos europeos «Next Generation» procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea. Con estas actuaciones, el Principado pretende favorecer la movilidad sostenible en sus ciudades y áreas metropolitanas. Dentro de estas actuaciones en el ámbito del transporte, se trabaja de forma coordinada para ejecutar la pasarela que conectará las estaciones de tren y autobús en la capital asturiana.  

Las dimensiones del espacio de Llamaquique serán menores que las del HUCA, donde se creará un anillo que albergará una estructura cubierta de 300 metros cuadrados. Por una cuestión de espacio, el intercambiador no podrá contar con tantos servicios como el del hospital, donde se construirán aseos, un aparcamiento para bicicletas, zonas de espera con puntos de recarga eléctrica y de información, cajeros de billetes de transporte, áreas de venta y kioscos de café. No obstante, en los pliegos no se especifica si existirá alguno de estos servicios en la calle Antonio Suárez. 

La redacción del proyecto asociado a las obras de Llamaquique fue elaborado a encargo de Fomento por la empresa Técnica y Paisaje (TEYPA) Ingeniería, con sede en Oviedo y de acuerdo con el Ayuntamiento de la ciudad. Una vez se adjudiquen las obras, los trabajos comenzarán con el desmontaje de la marquesina existente, así como con la retirada y acopio de la tierra vegetal en la zona donde se ubicará la nueva marquesina. A continuación, se procederá a la demolición y levantado de pavimentos incluyendo la solera inferior de hormigón para lograr el encaje de la cimentación. Por último, se dispondrá la estructura de acero que conforma la propia marquesina y se instalarán el resto de elementos entre los que destaca un sistema de alimentación mediante placas solares.

Durante la ejecución de los trabajos, se producirá una interferencia con la parada de autobús. Fomento propone su traslado provisional a la parada existente en la calle Doctor Alfredo Martínez, que se encuentra a 150 metros de distancia del punto de recogida actual. La influencia en el tránsito se prevé menor que en la obra del HUCA, donde la Avenida Roma, la calle Juan Antonio Álvarez Rabanal y las intersecciones de estas con el resto de calles en el entorno de la actuación se verán afectadas. No obstante, dado que todas estas vías disponen de más de un carril de circulación, se mantendrá en todo momento la circulación con el corte de un carril en cada calle durante la ejecución de las obras. Desde Fomento aseguran que la reordenación de los espacios de parada de los autobuses se afrontará sin generar tráficos adicionales.