"Hemos perdido dos partidos contra dos rivales directos. Y el Rayo es uno de esos rivales directos. Ganarles es un reto para nosotros tras caer fuera ante Osasuna y Numancia". Paco Herrera, entrenador del Sporting, se muestra ambicioso ante la visita a Vallecas tras cumplir cien días en el cargo desde que se iniciara en julio la pretemporada. Los rojiblancos se miden mañana a un rival que, como el propio técnico destaca, "ha sido el único que sumó nueve puntos la pasada semana" y al que define como "uno de los que mejor ataca de la categoría en este momento". Tampoco le falta pólvora al conjunto gijonés y Herrera incluso bromea con el deseo de uno de sus delanteros, Santos, en ocupar la punta de ataque y no actuar escorado al costado izquierdo. "Santos tiene razón. El que lo está puteando soy yo", comenta con una sonrisa. "Trato de que su velocidad nos dé cosas en banda. A lo mejor tiene que aguantar ahí hasta la segunda vuelta", amplía el preparador rojiblanco.

"El Sporting es el Sporting y no puede deambular por mitad de la tabla. Mi trabajo es mejorar al equipo y todavía no hemos alcanzado nuestro cénit", sentencia Paco Herrera. Al entrenador rojiblanco no le pesa cargar con la vitola de favorito al ascenso, o como "el rival a batir, porque lo somos". No es ningún pecado de vanidad, como el propio técnico aclara. "El Rayo también es un muy buen equipo. Es un partido de igual a igual. Este año hay por los menos seis u ocho equipos que están un poco por encima del resto o sino, están muy igualados entre ellos", destaca antes de enfatizar que "quiero que en Vallecas hagamos un partido en el que nos reconozcamos".

Herrera da muestra de que tiene bien estudiado al Rayo, del que teme no sólo su gran fortaleza ofensiva. "Ellos cierran muy bien el campo por dentro. Te facilitan las bandas, pero para que te equivoques. Debemos utilizar las bandas para ciertas cosas, pero centrados en que ahí puede estar nuestro problema", comenta. Lo hace antes de señalar que valora el gran momento que está experimentando el exrojiblanco Trejo, pero también conoce a fondo a otro de los atacantes rayistas. "También me preocupan Embarba o Raúl de Tomás, un pedazo de delantero al que tuve en el Valladolid el año pasado. Me hizo catorce o dieciséis goles. Acabó como un cañón", destaca el preparador del conjunto gijonés.

Los primeros cien días de Herrera han dejado alguna incógnita, como la debilidad del equipo cuando se enfrenta a rivales de la zona alta. El entrenador del Sporting afirma que sabe la causa, pero evita desvelarla. En todo caso, da alguna pista. "Puede ser más psicológico que futbolístico. Estamos trabajando en esos detalles. Hay que afrontar los partidos de fuera igual que el resto. Al principio creo que era una situación que yo había provocado con el estilo o la idea de juego. Espero que a partir de ahora el equipo se reconozca por otra idea de juego", explica.

La autocrítica siempre ha formado parte del discurso de Herrera, en las buenas y en los momentos que no lo han sido tanto. El entrenador vuelve a hacer gala de ello al realizar un balance de este inicio de campaña "No soy de los que se aferra a algo. Me he equivocado y cambiaría todo lo que me he equivocado en este tiempo. Creo que al final, el equipo lo ha entendido en positivo y ha ido corrigiendo cosas. Empezamos a entender hacia donde tenemos que ir", señala. En cuanto a lo personal, asegura que "estoy muy feliz. Tengo mucha ilusión, la misma que puede tener el entrenador más joven de la categoría. Aquí me siento respetado y querido. Tengo muchas ganas de cubrir los objetivos que tenemos fijados", subraya.

En cuanto a fichajes en el mercado de invierno, después de que Javier Fernández, presidente del Sporting, dejara esta semana la puerta a abierta a este apartado al asegurar que hay en caja una cantidad suficiente para asumir la incorporación de un futbolista importante, el entrenador del Sporting se centra en lo que tiene ahora en sus manos. "No me preocupan los fichajes", comenta antes de destacar una de las caras nuevas de esta semana en los entrenamientos, el canterano Bertín. "La idea es que él empiece a venir más días y que se sume algún otro jugador. Hay que sacar rendimiento a posiciones en las que podemos estar débiles. También quiero ver a Mateo para jugar de mediocentro y cuento con que, a partir de la segunda vuelta, Cristian también esté con nosotros. Me centro más en ese tipo de cosas que en fichar jugadores importantes", concluye.