Noreña, Franco TORRE

Un incendio calcinó en la mañana de ayer la zona de cocinas de la fábrica de embutidos Juntamar, en Noreña. El fuego, que no causó daños personales, pudo ser contenido a tiempo y no afectó al resto de la factoría, aunque además de los daños en las instalaciones ha ocasionado cuantiosas pérdidas a la empresa, con una plantilla de más de 30 trabajadores, ya que ha destruido varias toneladas de chorizo y morcilla. En conjunto se estima que entre 30 y 50 toneladas que se encontraban ahumando en esa parte del inmueble.

El incendio se inició en torno a las 9.30 de la mañana. En un primer momento, los trabajadores trataron de apagar el fuego con un extintor, aunque rápidamente comprobaron que, por sus dimensiones, se requería la intervención de los Bomberos, y llamaron al 112. Al tiempo, un empleado de la factoría cerró la puerta de seguridad de la cocina, una acción que resultó esencial para evitar que las llamas afectasen a otras partes de las instalaciones.

Tras recibir el aviso en el centro de coordinación de emergencias, y según informa el 112-Asturias, se movilizaron doce efectivos del Cuerpo de Bomberos de los parques de La Morgal, San Martín del Rey Aurelio, Villaviciosa y Avilés, que llegaron al lugar unos minutos después de las 10. En el operativo también participaron agentes de la Guardia Civil del cuartel de Noreña, y la Policía Local del concejo chacinero.

Las labores de extinción del fuego fueron complejas debido a las condiciones de la propia sala, de dos plantas, y al hecho de que hubiese gran cantidad de chorizo y morcilla en su interior, pues la grasa alimentó las llamas, que a su vez incrementaron la temperatura de esa estancia por encima de los 500 grados. La alta temperatura afectó incluso a su estructura de la sala, reforzada con vigas de acero.

Pese a todo, los Bomberos pudieron controlar el fuego, que se dio por extinguido poco después de las once de la mañana.