Oviedo, Javier CUARTAS

La familia asturmexicana Arango, accionista dominante del Grupo Vips (70%), líder de la restauración en España, está afrontando la crisis económica con la expansión de sus unidades de negocio, la puesta en marcha de nuevos conceptos, el reforzamiento de su implantación fuera del país y el primer paso en una estrategia de integración en vertical tras dotarse de su primera planta de producción. Entre el año pasado y éste prevé invertir 10 millones de euros en una gran ofensiva contra la caída del consumo.

Los Arango, originarios de Salas y que en España siempre han sido comerciantes, han recuperado el talante industrial que mantuvieron en México hasta fines de los años 50 y han dado su primer paso fabril en la península ibérica con la constitución de su primera empresa fabricante: British Sandwich Factory (BSF), con factoría en Agustín de Guadalix (Madrid), que supuso una inversión de más de 1,5 millones de euros.

Se trata de un proyecto aún incipiente, según fuentes de la familia, que nació para el autoabastecimiento de determinadas elaboraciones alimentarias para las cadenas de restauración del grupo y que desde el año pasado ha empezado a comercializar su gama de productos para terceros: suministra al área de restauración de algunas cadenas comerciales relevantes y el «catering» de aerolíneas, entre otros clientes.

El grupo, que está presente en Portugal con siete de las 83 cafeterías Starbuck que gestiona en la península Ibérica (Vips es licenciatario en exclusiva para España y Portugal de la multinacional estadounidense de café), proyecta desarrollar en el país vecino otras dos de sus marcas de mayor éxito: los Vips (cafeterías-restaurante, con o sin tienda, de amplio horario, de acuerdo con el concepto de restauración informal o «casual dining») y la enseña de restauración italiana Ginos. La implantación en el mercado luso de ambas enseñas (de las que ya posee 131 y 97 locales en España, respectivamente), que iba a acometerse este año, se ha demorado al segundo trimestre de 2012 a causa de las difíciles circunstancias económicas por las que atraviesa Portugal.

En España el grupo de titularidad familiar (Goldman Sachs posee el 30% del capital como socio financiero) está afrontando el retroceso del consumo con el lanzamiento de nuevos conceptos. Desde finales de diciembre el grupo ha puesto en marcha una nueva línea de negocio, denominada Vipsmart, con un establecimiento-piloto en San Sebastián de los Reyes (Madrid). Se trata de un restaurante de «fast-casual» o «quick service», basado en la restauración rápida y la elaboración en el momento, con un precio a mitad de camino entre el «fast-food» y el «casual dining».

A este lanzamiento, aún en fase experimental, se sumará la inminente puesta en marcha de una cadena de hamburgueserías «gourmet» bajo licencia del grupo portugués H3. Ambas operaciones suponen la incursión del Grupo Vips en el ámbito dominado por las cadenas de comida rápida.

La inauguración del primer local H3 en España, -los Arango tendrán la licencia en exclusiva de la marca para el mercado español- está prevista para este mes. H3 nació hace 4 años y factura 20 millones en Portugal.

Junto con ambas enseñas, el grupo está a punto de reabrir el restaurante madrileño Teatriz, una de sus marcas estrella en restauración singular, y que ha sido remodelado tras veinte años desde que se inaugurara.

A los restaurantes singulares que ya manejaba el grupo (Teatriz, El Bodegón, Iroco, Bice, Mood, Rood, Manzoni, Lucca, Tattaglia, Rugantino y Paparazzi, todos ellos en Madrid), la familia ha sumado ahora su decimosegundo establecimiento con la puesta en marcha, en La Moraleja (Madrid), del restaurante Manzoni, de acuerdo con un diseño propio y singular, y especializado en alta cocina italiana.

Para este otoño el grupo prevé también la implantación de una nueva cadena de restauración especializada en comida asiática con una propuesta «novedosa y sorprendente» y un precio medio superior al de The Wok, los restaurantes asiáticos que ya posee la familia desde 2005.

Estos lanzamientos se producen mientras el grupo trabaja en el diseño de un modelo de franquicias para la expansión bajo este modelo de gestión de algunas de sus enseñas más conocidas, incluida la marca madre y capital del grupo, los Vips.

Hasta ahora la familia Arango había acometido todo el desarrollo del grupo bajo la titularidad propia de sus establecimientos, con la única excepción de la enseña Ginos, de la que posee 92 restaurantes propios y 5 franquiciados. El propósito del grupo es extrapolar esta experiencia a otras enseñas. «Se está diseñando la fórmula, pero probablemente no se haga aún este año. Se está trabajando en un modelo franquiciable, pero hay que darle aún más vueltas», explicó una fuente del grupo.

Esta ofensiva del grupo tiene sólo como excepción el repliegue de la cadena Tío Pepe, fundada en alianza con González Byass.

El plan expansionista de los Arango trata de atajar, con innovación, diversificación y nuevas fórmulas, la caída de la demanda a causa de la crisis económica. «Nos movemos en el sector de consumo de alta frecuencia y tique medio-bajo, que ha sufrido mucho desde 2008», explicó el consejero delegado del grupo, Enrique Francia, cuando en julio presentó los resultados de 2010. Grupo Vips facturó 401,8 millones (5,8% menos) pero el beneficio (0,7 millones) se contrajo el 88,5% por ausencia de resultados extraordinarios en 2010. En términos homogéneos la caída fue del 30% El endeudamiento del grupo (23,5 millones) se redujo el 37%.