L. S. NAVEROS

Más control sobre los infractores y mayor eficacia en la gestión del cobro de tributos. Éstas son las dos patas en las que se apoyará el Ayuntamiento de Oviedo para mantener el nivel de ingresos previsto en el presupuesto de 2012, para compensar en parte la caída de ingresos de otras áreas, como los impuestos relacionados con la actividad del «ladrillo» o las transferencias del Estado.

Los conductores tendrán que andarse con ojo en 2012 para circular por las calles de Oviedo. Los nuevos radares que han comenzado a instalarse, junto a los «foto rojo» que ya funcionan en algunas glorietas, como la de plaza de Castilla, «cazarán» a los infractores que no respeten los límites de velocidad. Los nuevos radares, que han comenzado a colocarse este mes, están en las calles Muñoz Degraín, en el último tramo de la autopista «Y», en la calle Independencia, en la calle Favila (en la salida hacia San Claudio) y dos en el bulevar de La Florida.

El presupuesto del año que viene ya refleja la nueva realidad que se vivirá en las calles de la ciudad, ya que prevé que los ingresos por multas aumenten en 1,2 millones de euros, situando la recaudación por este concepto en 4,2 millones de euros.

Otro de los tributos en los que aumenta significativamente la previsión de ingresos del Consistorio ovetense para el próximo año es el IBI. El Ayuntamiento espera ingresar 2,4 millones más por la contribución que este año. Según fuentes municipales, este aumento en las previsiones se debe a que numerosos pisos de nueva construcción de la ciudad comenzarán a tributar el IBI en 2012, tras haber sido dados de alta en el padrón municipal del impuesto. La revisión catastral prevista para 2012 no afecta a esta subida, ya que se hará durante el próximo ejercicio, pero no se podrá aplicar hasta el año siguiente. El PP ha asegurado en numerosas ocasiones que la revisión catastral no afectará a los recibos, ya que se ajustará el tipo del impuesto para no ocasionar un «Catastrazo» con la revisión de los valores de los pisos y fincas del municipio.

El Ayuntamiento financiará además parte de sus inversiones con un préstamo, que ascenderá a 7,5 millones de euros, frente al crédito pedido este año, que fue de 2,5 millones.

Según las expectativas de cobro que tienen los técnicos municipales, y que se reflejan en el proyecto de presupuesto que está tramitando el Ayuntamiento, habrá una rebaja de casi un millón de euros de ingresos en concepto de IVA, y también se reducirá en más de un millón el impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos, conocido como plusvalías.

Los ingresos por la grúa no suben oscilaciones, así que no se espera recaudar más por esta vía, y también se mantienen los cobros de este año por la utilización de la zona azul.

El presupuesto asciende en total a 196,7 millones de euros, de los que 14,4 se destinan a inversiones.