"El Xiringüelu es la fiesta de la humanidad", afirma la pregonera Rebeca García en Pravia

La paleoantropóloga abrió la romería con un divertido pregón en el que vincula su campo de estudio de la evolución humana con el festejo

La pregonera, Rebeca García, ayer, en el balcón del Ayuntamiento. | Pepe Alonso / Cofradía del Xiringüelu

La pregonera, Rebeca García, ayer, en el balcón del Ayuntamiento. | Pepe Alonso / Cofradía del Xiringüelu / Sara Arias

"El Xiringüelu de Pravia es la fiesta de la humanidad". Así lo expuso este viernes la pregonera de la romería, la paleoantropóloga Rebeca García, desde el balcón del palacio de Moutas, ante un numeroso público congregado en la plaza de la Colegiata que animó y aplaudió a la pregonera. El poder caminar sobre dos piernas, el desarrollo del lenguaje y hasta el pensamiento simbólico, las facultades que empujaron el desarrollo de los humanos, tienen mucho qué ver con la fiesta praviana.

"Si no, ¿qué me decís de lo bien que lo hacemos en el práu de Salceú? A pesar de la sidra y de los sucos del prau, todos nos mantenemos en equilibrio sobre las dos piernas. Bueno, quizás en algunos casos podemos atisbar una pequeña reversión evolutiva por la que algunos individuos vuelven a la cuadrupedia", señaló divertida.

Y tal y como explicó, caminar sobre dos piernas liberó las manos de los humanos dando inicio a un gran avance: "Solemos decir que eso permitió que empezásemos a construir herramientas, pero no me podréis negar que la mejor función que tienen unas manos libres es ‘escanciar sidra’".

La capacidad cognitiva de hablar también tiene su vínculo con el Xiringüelu, porque en la romería todos se preguntan qué tal ha ido el año o cómo está la familia. "Nos pirramos por conocer la vida de nuestros congéneres. Tanto es así, que hay quien dice que somos la especie cotilla. Queremos saber que sienten otras personas, incluso cuando están inmersos en actividades que nosotros no realizamos. Vamos, que se lo digan a los humanos que se pasan el domingo del Xiringüelu en el puente. No lo viven, no lo saborean, no lo sienten en primera persona, pero lo comentan".

A esas cualidades biológicas se suma el pensamiento simbólico que, para la pregonera, es el que más define la fiesta. "Gracias a esa capacidad, formamos grupos que van más allá de los lazos familiares, nos agrupamos en torno a símbolos que nos representan. ¿Y qué puede haber más simbólico que durante un día al año nos agrupemos en torno a un símbolo que es el color de la camiseta de nuestra peña?", planteó.

García, una de las especialistas que trabajan en Atapuerca (Burgos), aseguró sentirse honrada de anunciar el Xiringüelu y terminó su pregón con una propuesta, declarar la romería como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad: "Los requisitos, como he intentado exponer de forma más o menos clara, los cumple sobradamente" concluyó.

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