El centenario Casino de Mieres, al borde de su disolución definitiva

El Casino de Mieres, una de las sociedades socioculturales con más arraigo en el concejo, atraviesa desde hace más de una década por una muy compleja situación que podría incluso desembocar en la disolución de esta centenaria entidad, una de las más antiguas del municipio. La actual directiva ha comunicado su intención de no continuar al frente del colectivo. Tras dos asambleas, nadie parece dispuesto a tomar el relevo. El vacío de poder se suma así a una muy difícil situación económica.

El Casino de Mieres lleva dos años sin actividad. Las instalaciones cerraron con el estallido de la pandemia y no han vuelto a abrir. La entidad agoniza con un hilo de vida gracias a que algo más de medio centenar de socios permanecen fieles a la misma por una cuestión de apego. En la última asamblea, ante la ausencia de un nuevo equipo directivo, se ha puesto sobre la mesa la disolución definitiva del Casino.

Los responsables del Casino consultados por este diario reconocieron la difícil situación. Ahora bien, subrayaron que la decisión sobre el cierre definitivo del Casino se tomará en una asamblea que se celebrará no antes de un mes. “En estos momentos sería prematura adelantar lo que puede suceder, pero el cese de actividad es una posibilidad factible”.

Hace ahora 11 años ya costó que alguien asumiera la dirección del Casino. El recorte de ingresos y un contencioso laboral pusieron la instalación al borde de la clausura. Los actuales gestores dieron entonces un paso adelante y salvaron la complicada situación. No obstante, el Casino se ha limitado a lo largo de la última década a sobrevivir, con un constante goteo de baja de socios.

La historia del Casino de Mieres se remonta a 1870. Llegó a contar con más de 800 socios, convirtiéndose en un referente social y cultural de la ciudad. De hecho, los responsables de la sociedad crearon en 1980 el premio literario más importante de cuantos se han concedido en Mieres. El premio de Novela “Casino de Mieres” se concedió durante casi cuarenta años. Las amplias dependencias ubicadas frente a la plaza La Pasera acogieron durante décadas bailes con orquesta que se celebraban en Fin de Año, Reyes, Carnaval, San Valentín y San Juan. El recinto también fue un referente para la práctica del billar, con campeonatos de alcance nacional.

Hace unos años el casino ya tuvo que vender parte de sus dependencias.

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