El Principado, esperanzado en encontrar un inversor para la planta de Vesuvius: "Hay cuestiones avanzadas"

Fue a finales del año 2019 cuando la empresa Vesuvius, ubicada en el polígono de Riaño, en Langreo, bajaba la persiana. El grupo británico dueño de la compañía tomaba la determinación, justificándola en la crisis del acero, de poner el candado a la planta langreana, dejando sin empleo a más de 110 personas que componían entonces la plantilla. Cuando se han cumplido tres años del cierre, la alternativa industrial para la planta, que fue uno de los compromisos adquiridos al cerrar la misma, aún no ha llegado. Sin embargo, desde la Consejería de Industria del Principado esperan que en los próximos meses pueda aparecer un proyecto que dé vida de nuevo a la nave industrial. El propio consejero de Industria, Enrique Fernández, reconocía que pese a todas las dificultades de los últimos años "nunca hemos tirado la toalla, y esperamos que a la mayor brevedad se puedan anunciar novedades".

Fernández explicó que el proceso para encontrar inversores que reflotaran la planta langreana y dieran una alternativa industrial y laboral ha tenido importantes reveses. "A la malísima noticia de la decisión de la compañía de la deslocalización de su producción en Langreo, luego se sucedieron la pandemia y la crisis derivada de la invasión de Ucrania, y todas estas cuestiones han enfriado mucho los ánimos inversores en general", señalaba el Consejero, para agregar que por estos motivos "la labor de búsqueda de una empresa que se pudiese ubicar en Vesuvius, aunque ha continuado, se ha encontrado con un terreno poco fértil y unas dificultades excepcionales".

En cualquier caso, y pese a los palos en las ruedas, el responsable regional explicó que "las labores para encontrar inversores han continuado, y se ha convocado periódicamente la mesa para la reindustrialización de Vesuvius en la que están los sindicatos, el Gobierno de Asturias, el de España y la propia compañía". "Y lo que esperamos es que fruto de ese trabajo que ha sido continuo, a la mayor brevedad posible, anunciar algún tipo de proyecto para esa planta", agregó.

Porque la factoría radicada en Riaño sigue siendo atractiva, o al menos así lo reconocen los que han mostrado interés por la misma. "Quienes han visitado la planta reconocen que se trata de un lugar con unas condiciones ventajosas, unas condiciones excepcionales, lo que en ese sentido va a facilitar que pueda instalarse un proyecto industrial", indicó Fernández. Ha habido y hay conversaciones con empresarios e inversores, pero aún no se pueden concretar ni poner nombre y apellidos. "Existen cuestiones avanzadas, e incluso podríamos decir que muy avanzadas, aunque en este tipo de gestiones la prudencia se impone y la confidencialidad es una condición imprescindible que exigen los propios inversores", dijo Fernández, que agregó que "esperamos que podamos anunciar algo antes de que pueda finalizar la legislatura".

Lo que quiso dejar meridianamente claro el Consejero es que en ningún momento se ha abandonado la idea de reflotar la planta con una industria alternativa: "No se tira la toalla, es una gran instalación que se está manteniendo y conservando, y que los propios inversores reconocen que tienen un gran atractivo, lo que aumenta mucho las posibilidades de futuro".

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