El balneario del Montepío consolida su recuperación tras la pandemia y registra beneficios por segundo año consecutivo

El incremento en la ocupación de las instalaciones, que llegaron a estar en preconcurso de acreedores, permitió cerrar 2022 con un balance positivo de 48.000 euros

El balneario de Ledesma.

El balneario de Ledesma.

Andrés Velasco

Andrés Velasco

El Montepío de la Minería está cerrando el balance económico del ejercicio 2022, que ya ha dejado las primeras cifras. Aunque provisionales, estos datos reflejan que para el Balneario de Ledesma "ha sido un año positivo que nos ha permitido seguir avanzando en la recuperación de los parámetros de ocupación y resultados que teníamos antes del estallido de la pandemia". Una pandemia que dejó muy tocado al hasta entonces buque insignia del Montepío y que le llevó a cierres obligatorios acumulando pérdidas de 1,2 millones de euros y en situación de preconcurso de acreedores. Esa pesadilla parece haber terminado y el Montepío ha logrado en sus instalaciones salmantinas unos beneficios de 48.000 euros, que siguen la tendencia de los ya obtenidos en 2021, cuando, tras las medidas correctoras aplicadas por la dirección de la mutualidad, se lograba un equilibrio financiero tras el brutal batacazo pandémico.

El presidente del Montepío, Armando Fernández Natal, explicó que "en el último año, hemos recuperado gran parte de nuestra clientela habitual, fundamentalmente la que nos llega a través de los programas de termalismo para mutualistas (Montepío y convenios), IMSERSO y clientes particulares, segmento que observamos gana presencia con nuestra oferta de servicios, animación y ocio. Sobre todo ante el fuerte empuje del turismo de salud y, en particular, el de la recuperación deportiva y escapadas en pareja o familia o experiencias, gracias a los recursos para el turismo activo o de historia que brinda la zona".

Todavía falta para recuperar los niveles anteriores a la pandemia, pero desde el Montepío son optimistas: "Las cifras en Ledesma muestran una senda de recuperación que nos han permitido lograr unos resultados positivos de 48.000 euros". A eso se suma que el porcentaje de ocupación en la última temporada termal fue del 53%, justo el doble registrado en el ejercicio anterior. "Para este año 2023 el objetivo es seguir acercándonos a la cifra del 70% de ocupación, un porcentaje que supone una referencia para nuestra actividad", apunta Fernández Natal, que agrega que "estos resultados provisionales, pendientes aún del cierre definitivo contable del ejercicio, suponen un acicate para las medidas de recuperación implementadas en los últimos meses con responsabilidad y transparencia empresarial, y con eficiencia y eficacia en la parte técnica y profesional".

Impulso

Aunque son cifras modestas, en el seno del Montepío se valoran como un gran impulso, resultado de la gestión llevada a cabo que permitió culminar, por primera vez desde 2019, una temporada termal completa. Además, "es importante remarcar que estos resultados se logran apostando por la contención de las tarifas a clientes mutualistas, frente a un contexto socioeconómico extremadamente complicado, condicionado durante estos últimos meses por el impacto de la inflación y la escalada de precios. Esto supuso encajar un encarecimiento de todos los servicios necesarios para el funcionamiento del Balneario, desde los de suministros alimenticios hasta los energéticos, sobremanera", señalan desde la entidad, que destacó su carácter social.

Desde hace 43 años, el Montepío gestiona el histórico Balneario de Ledesma, de origen romano, del que es propietario desde 1990. Sus aguas termales son Bien de Interés Minero Medicinal desde 1886, siendo pionero de la red de termalismo social en España.

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