Langreo reclama mancomunar la perrera municipal ante el aumento de los costes

El Ayuntamiento de Langreo pedirá a la Mancomunidad que se haga cargo de la perrera municipal, con el objetivo de que todos los municipios de la comarca "compartan los gastos" que el mantenimiento de la instalación supone, un coste que ronda los 90.000 euros al año. El albergue canino langreano está a plena capacidad tras el repunte de abandonos registrado en las últimas semanas y el Consistorio langreano –el único de la comarca que cuenta con perrera– teme que la tendencia siga al alza y que los costes se disparen, hasta que llegue un momento en que sean "inasumibles".

Así lo explicó el edil langreano de Protección Animal, Pablo Álvarez, que detalló los planes del Ayuntamiento: "Nuestra propuesta será comarcalizar la gestión del albergue canino para que pase a depender de la Mancomunidad, repartiendo los costes entre los municipios. Es una de las ideas que vamos al llevar al organismo comarcal". Álvarez argumentó que el "coste de mantenimiento es de 90.000 euros anuales y debe haber una colaboración entre todos los municipios para hacerse cargo de esos gastos. Lo más justo sería que todos los concejos del Valle contribuyeran porque ahora nosotros nos estamos haciendo cargo en solitario de perros que nos llegan de todos los sitios. Lo que está pasando es que los dejan abandonados junto a la valla, en la puerta, y cada día hay más". Para el edil, comarcalizar el servicio "también sería una buena opción para dar cumplimiento a la ley de bienestar animal, que marca unas obligaciones a los municipios".

Tendencia al alza

La ocupación en la perrera ha crecido de forma considerable como consecuencia de los abandonos. "Ahora tenemos 52 perros en el albergue. Lo normal es tener entre 30 y 40, aunque con 50 también pueden estar bien atendidos. El problema es que tememos que las cifras de abandonos sigan creciendo hasta que llegue un momento en que sea inasumible", señaló Álvarez, que también se refirió al tipo de canes acogidos. "El 90 por ciento de los perros que tenemos son potencialmente peligrosos y eso dificulta las adopciones, porque no todos pueden ir a una casa. Ahora la mayoría del aforo está cubierto con esas razas. Los perros pequeños no duran una semana en el albergue porque las adopciones en este caso sí que son mucho más ágiles. Con ellos hay muchísima demanda".

Pablo Álvarez ya había alertado la pasada semana de que la nueva ley de bienestar animal "por supuesto que va a incrementar los gastos. Nosotros somos uno de los pocos ayuntamientos con un albergue canino municipal, con unas partidas económicas ajustadas al aforo que tiene. Lo que están aumentando los abandonos por las exigencias que tiene la ley en cuanto a censos, seguros de responsabilidad civil, implantación de los chips y que no se pueda tener un perro más de 24 horas solo. Nos preocupa el aumento de los abandonos y el aumento de los costes porque teníamos el albergue dimensionado al aforo que había. Puede ser necesario más personal y la situación económica de los ayuntamientos es la que es".

En alusión a las colonias felinas el concejal langreano apuntó que "se calcula que solo un 10 por ciento de los ayuntamientos pidió las subvenciones para las colonias felinas, para la captación, esterilización y retorno. Nosotros somos uno de ellos, esos deberes ya los tenemos hechos y, además, contamos con una red de voluntarios que están colaborando en esa gestión".

El aumento de abandonos caninos también se ha detectado en otros ayuntamientos como Mieres. En la perrera municipal, la ocupación llegó a principios de verano, en junio, a alcanzar los 38 animales, por los 27 que había en mayo. En verano, muchas familias deciden abandonar a sus mascotas por no poder hacerse cargo de ellas en el periodo vacacional.

Desde el Ayuntamiento de Mieres se recordó entonces que el abandono de animales es un "delito penal".

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