¿Si pregunto, molesto?

Cabría imaginarse de quien con su "¿Si pregunto, molesto?" hiciera propia una enseña de identidad en todos sus columnas dedicadas al Real Sporting (cuánto mejor sin el triste apellido de SAD), Don Julio Puente, mierense de nacimiento pero gijonés de adopción, qué sería por lo que inquiriese el maestro de maestros del periodismo, tras una pretemporada con más salidas que entradas, en una plantilla que ya mostraba serias carencias la pasada temporada y con un primer partido donde se ofreció una pésima imagen, frente a un equipo, plagado de jugadores procedentes del filial.

Con una nutrida presencia de seguidores sportinguistas, el primer choque dialéctico entre ambas aficiones presentes en el nuevo Estadio de José Zorilla tuvo lugar en los prolegómenos del partido.

El caso es que como otras temporadas, y en algo que no estaría de más, "plagiasen" los propietarios actuales del club sportinguista, el Real Valladolid solicitó a los presentes guardar un minuto de silencio por los socios o aficionados blanquivioletas fallecidos durante la pasada estación,

Sin embargo, la mayoría de La Mareona ubicada como ganado en uno de las esquinas del campo, como si fueran todos "hoolingans" desbocados, no guardaron respetuoso silencio, debido al escaso volumen de la megafonía.

No tardó la Federación de Peñas Sportinguistas en reaccionar y emitir un escueto comunicado por este malentendido, deseando al equipo de Pucela la mejor de las suertes, de cara a poder lograr la salvación o incluso algo más, durante el resto de los 41 partidos que aún quedan por disputarse.

Pero en todas partes cuecen fabes, si bien para "cocidas" las que llevaban más de uno y más de cien, por ambas partes. Por cierto, de nuevo digo aquello de ¿si pregunto, molesto?, para hacer llegar de algún modo mi cuestión al Ayuntamiento de Valladolid, así como a su equipo: ¿cómo es posible que permitan la explotación de un negocio, situado en el propio estadio, sin disponer este de ningún tipo de aseo. Que todo sea dicho, dentro del campo, para La Mareona únicamente había disponibles dos aseos.

Otro apartado a considerar sería el del aparcamiento: ¿por qué en el campo de la ciudad del Pisuerga, este no se restringe en modo alguno, como sí se hace (con 48 horas de antelación) a la vera del Piles? ¿Jugamos a caso en dos competiciones diferentes? Vamos a ver así cómo se las compondrán los seguidores rojiblancos en el próximo encuentro a disputarse en El Molinón, Enrique Castro "Quini", con todo lo que hay montado en sus alrededores y en plena Semana Grande. Alguno aparcará en el Campo Valdés.

Como ven, del partido de este domingo, ni pío. Pero a lo que hace décadas fue una gallina de los huevos de oro le han arrancado todas sus plumas. De aquel club con Mareo como orgullo patrio no queda ni rastro. Se podría decir que Mario Cotelo es de las contadísimas excepciones que aún resisten a la liquidación a precio de bazar chino, de lo que representaba una de las mejores escuelas de fútbol, sino la mejor junto a Lezama, de las surgieron innumerables valores, y en la que se inculcaban aún más a los infantes que tenían el privilegio de vestir los colores del club de sus amores.

Por suerte, pero a esta hay que echarle siempre una mano, hay aún remedio para esta nefasta gestión deportiva, pues de lo contrario, el abismo de la otrora Segunda B no es que esté cerca, es que está más garantizado que los fuegos el próximo 14 de agosto.

Suscríbete para seguir leyendo