La contaminación en Gijón supera los límites para la protección de la salud

La evaluación del aire del Ministerio para la Transición Ecológica refleja que todos los contaminantes sobrepasan las barreras que fija la Organización Mundial de la Salud

Al fondo, una nube de contaminación, la más próxima al suelo, sobre parte de Gijón, en una imagen tomada a última hora de la tarde de ayer desde el paseo marítimo.

Al fondo, una nube de contaminación, la más próxima al suelo, sobre parte de Gijón, en una imagen tomada a última hora de la tarde de ayer desde el paseo marítimo. / M. C.

M. C.

Dentro de la legalidad, pero muy lejos de cumplir con los topes que ha establecido la Organización Mundial de la Salud (OMS) para considerar que el aire no sea insalubre. Ese es el estado de la contaminación en Gijón que se refleja en la última evaluación de calidad del aire que ayer hizo pública el Ministerio para la Transición Ecológica, en el que se recogen las mediciones efectuadas en toda España en 2022 y dentro de las que Asturias no sale bien parada en base a los criterios de protección de la salud que ha establecido el organismo de naciones unidas.

Los límites de contaminación admisibles en base a la actual legislación de la Unión Europea son más elevados que los valores guía que recomienda la OMS. Una normativa que se está planteando revisar en la UE para aproximarla a los criterios de la OMS. El documento del Ministerio para la Transición Ecológica destaca los puntos donde se han superado los límites legales –ninguno en Gijón al descontar los días en los que influyó el polvo del Sahara– pero también reseña la calidad del aire en base a los criterios de la OMS. En caso de Gijón se superan los topes recomendados por la Organización Mundial de la Salud para todos los contaminantes analizados; el dióxido de nitrógeno (NO2), las partículas inferiores a 10 micras (PM10) y 2,5 micras (PM2,5) y el ozono a nivel del suelo.

El informe reseña en cada caso sólo los datos de la peor estación de control de las seis que hay en Gijón, aunque no las cita. Así, en cuanto a las medias anuales de contaminantes, la OMS considera que la del NO2 no debe exceder los 10 microgramos por metro cúbico, mientras que en Gijón el año pasado se alcanzaron los 21; los 15 en PM10 cuando en Gijón se alcanzaron los 38 y los 5 en PM2,5, mientras que en una de las estaciones de Gijón se llegó a los 14. En cuanto al nivel de ozono para evitar que afecte a la salud, el tope que establece la OMS es de 60 microgramos por metro cúbico de aire y el informe ministerial atribuye a Gijón una cifra de 95,08.

El documento también refleja que hay excesivas superaciones diarias. La OMS considera que no debe superarse más de 4 días al año los 25 microgramos de NO2, los 45 de PM10 y los 15 de PM2,5. Sin embargo, en la Avenida de la Constitución ese límite de NO2 se superó 120 días; en la Avenia de La Argentina se superó en 82 días el establecido para PM10 y en la de Santa Bárbara en 103 días el nivel recomendado de PM2,5.

Esos fueron los mayores excesos, pero revisando los datos oficiales del Principado se puede comprobar que en todas las estaciones de control de Gijón se sobrepasaron los límites recomendados por la OMS.

La contaminación por partículas (PM10 y PM2,5) es fundamentalmente de origen industrial, mientras que la de dióxido de nitrógeno procede en su mayor parte del tráfico rodado. El ozono, que en las capas altas de la atmósfera nos protege de la radiación ultravioleta, pero a nivel del suelo es dañino, se produce por reacciones de otros contaminantes con el oxígeno y por la radiación solar.

La valoración de los ecologistas

El informe del Ministerio para la Transición Ecológica llevó ayer a las organizaciones ecologistas a incidir en sus planteamientos sobre la necesidad de adoptar medidas. Paco Ramos, de Ecologistas en Acción, señala que "para la mayor parte de los contaminantes en casi todo el territorio asturiano se estarían superando los límites de contaminación" establecidos por la OMS, salvo la zona rural asturiana, considerando que "no se está interviniendo de manera efectiva" sobre los niveles de contaminación por partículas o por NO2, pidiendo adoptar medidas sobre el tráfico y la industria.

Además, Ramos indica respecto a los límites legales que "el informe presenta una situación sobre la calidad del aire en Asturias conocida, con la zona portuaria de Avilés y la zona oeste de Gijón como de peor calidad del aire en PM10", destacando que, en el caso de las estaciones de El Lauredal y la avenida de La Argentina aunque se cumplan los límites legales al descontar el polvo sahariano "no se está cumpliendo la protección de la salud", añadiendo que los valores de contaminación son similares a los de 2021 en PM10, "pero donde se nota un empeoramiento es en el ozono tanto en protección de la salud como en protección de la vegetación" por efecto del cambio climático al haber más radicación solar en Asturias.

Por su parte, el portavoz de la Coordinadora Ecologista de Asturias, Fructuoso Pontigo, resaltó que "según los datos oficiales del propio Gobierno de Asturias en su web sobre contaminación atmosférica y calidad del aire en el año 2022 se constató un aumento de los niveles de contaminación de las partículas con respecto al año 2021 en gran parte de las estaciones que miden la calidad del aire en toda la región.

El Principado modifica la autorización ambiental de Arcelor para un nuevo filtro

La Consejería de Medio Ambiente del Principado dictó el pasado 29 de junio la resolución, publicada ayer en el BOPA, mediante la que modifica la autorización ambiental integrada de ArcelorMittal en Asturias para incluir en la misma la instalación de un nuevo filtro de mangas en el enfriador del sínter A.

La colocación de ese nuevo filtro es una de las medidas recogidas en el plan de acción a corto plazo para la reducción de los niveles de partículas en suspensión en la zona oeste de Gijón y una de las inversiones que están pendientes de acometer y que han llevado al Principado a prorrogar por 18 meses dicho plan, hasta finalizar el año 2024.

La instalación de este filtro en el sínter A es una de las medidas alternativas que planteó Arcelor a la prevista inicialmente para colocar un filtro en la chimenea secundaria del sínter B, instalación que va a cerrar dentro de su plan de descarbonización. La otra medida alternativa, ya implementada, fue sustituir esa chimenea secundaria por otra más alta, de 60 metros de altura, que es desmontable, para su posterior aprovechamiento.

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