Las aulas asturianas se conjuran contra la era de la crispación: "Nos interesa que los chavales vean que hay realidades distintas a las suyas"

El instituto de Montevil, en Gijón, pone a prueba modelos de discurso y reglas de oratoria con el concurso de alumnos de cuatro comunidades

Un intercambio de opiniones con una notoria mezcla de acentos. Y sin un ápice de la crispación que transmiten otros entornos. De adultos. Y políticos para más señas. Eso es lo que se vivió a lo largo de la mañana de ayer en el IES Montevil de Gijón, donde tuvo lugar la primera jornada del proyecto nacional de debates "Habla, convence, transforma", en el que participan cinco centros de diferentes comunidades.

"Es una metodología complementaria a lo que se hace en clase. Esto permite que el alumno se ponga las pilas porque tiene que buscar la información, cribarla, ajustarse a unos tiempos y desarrollar la expresión oral", destacó Francisco Ramos, profesor de Lengua Castellana y Literatura en el IES gijonés y coordinador de la actividad en el centro.

Después de haber investigado en las últimas semanas en sus respectivos institutos, los alumnos viajaron hasta el Principado para debatir en el centro gijonés acerca de si existe una relación de causalidad entre la pobreza y la brecha de género. De esta manera arrancó el proyecto, enmarcado en el programa del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes "Agrupación de centros educativos", y compuesto por 57 estudiantes del IES Castelar de Badajoz, el IES Hernán Pérez del Pulgar de Ciudad Real, el IES Zoco de Córdoba, el IES Valles del Luna de Santa María del Páramo (León) y el IES Montevil de Gijón.

"Nos interesa que los chavales vean que hay realidades distintas a las suyas, pero que tienen ciertas cosas en común", ensalzó César Suárez, director del centro de Secundaria gijonés, que fue el encargado de darles la bienvenida a los escolares y docentes.

Por equipos y articulando sus argumentos "a favor" o "en contra", los debates giraron en torno a tres objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de la Agenda 2030: el fin de la pobreza, la igualdad de género y la reducción de las desigualdades.

Los primeros en dar a conocer sus discursos en el salón de actos fueron los pacenses Lucas Estebaranz, Alberto Morán, Candela Ramajo y Diana Bernal y los leoneses Bruno Grande, Sergio Manceñido, Elsa Verdejo y Claudia Cabello. A estos segundos les tocó defender que la pobreza sí es una de las causas de la brecha de género. "Los ingresos anuales de las mujeres siguen un 20% por debajo de los de los hombres. La lacra del desempleo golpea con más fuerza a las mujeres", expuso con convencimiento Manceñido. Pero Morán le respondió que esa "no es una condición suficiente para definirla como la causa". "Esa relación se da en casos específicos. No es necesario que haya pobreza para que se dé la brecha de género", indicó el alumno del IES Castelar, antes de ahondar en que "estamos totalmente convencidos de que influyen más otros factores culturales, psicológicos o socioeconómicos".

Otros encuentros similares transcurrieron en otros puntos del IES Montevil como la biblioteca o la sala de juntas. Todos se mostraron satisfechos con sus intervenciones y agradecieron la posibilidad de tomar parte en el proyecto. "Es una oportunidad única porque cuando sales fuera ves que hay temas y opiniones muy diversas", aplaudieron Noelia González, Pelayo Vigil y Andrea Suárez, de primero de Bachillerato del IES Montevil.

"Me parece un proyecto muy interesante porque las habilidades comunicativas son esenciales para nuestro día a día y es muy importante saber dar un discurso e improvisar delante de bastante gente", agregó Álvaro Borrachero, del IES Castelar, poniendo el foco en que "es bonito hacer un debate y escuchar distintos argumentos". En esa misma línea se pronunció Isabel Fernández, profesora de Lengua Castellana y Literatura en el IES Valles del Luna: "Es perfecto. Ganan soltura y eso les da seguridad para conocer a gente nueva y trabajar el tema del discurso y la oratoria. Es perfecto".

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