La banda de «Los Rastrojos», a cuyos miembros se les atribuye el secuestro hace ya más de un mes del ovetense S. M. B., de 28 años, por una deuda de drogas, es uno de los cuatro grupos paramilitares de narcotraficantes más poderosos de Colombia. La retención de personas no es una acción nueva para ellos, sino de lo más habitual, y sus secuestros no suelen durar más de dos o tres meses.

Según ha podido saber este periódico por fuentes cercanas a la investigación en el país sudamericano, desde hace días la Policía no tiene novedades y la investigación está en un punto muerto. La extensa red de organizaciones criminales en la zona del Cauca, donde se perdió la pista al español, y sus interrelaciones dificultan el avance de la investigación.

El Grupo Antisecuestro y Antiextorsión (Gaula) de la Policía colombiana se ha hecho cargo de la investigación para dar con el paradero del ovetense, que fue visto por última vez en la ciudad de Santander de Quilichao a principios de junio. Los investigadores creen que el joven y otras dos personas, de nacionalidad colombiana, fueron secuestradas al mismo tiempo y están en manos de «Los Rastrojos» en la región del Cauca, fronteriza con el departamento de Cali, donde se alojaba S. M. B.

Fuentes oficiales en España informaron que el ovetense pertenece a una banda de narcos integrada por media docena de personas que opera en Asturias y que el motivo de su viaje a Colombia está relacionado con el negocio ilegal de la droga. Según las mismas fuentes, su intención era abandonar el país sin pagar la mercancía, en este caso cocaína. «Los Rastrojos» lo habrían retenido para cobrarse la deuda. En principio, piden un millón de euros por su rescate.

«Los Rastrojos», también conocidos como las Rondas Campesinas Populares (RCP), están considerados una de las organizaciones criminales más poderosas de Colombia, junto a los hombres de «Chuchillo», la banda del «Loco Barrera», «Los Urabeños» y «Los Águilas Negras». Comandados por Luis Enrique Calle Serna, la banda estaría integrada por más de un millar de paramilitares. En la actualidad, el principal objetivo de «Los Rastrojos» pasaría por tomar el control de los cultivos de coca cada vez en más territorios.

Al margen de las pesquisas que siguen los investigadores en Colombia, en España tres personas fueron detenidas y enviadas a prisión en relación con este secuestro. Se trata de tres hombres con antecedentes por homicidio doloso que viajaron a Oviedo enviados por los narcos colombianos para tratar de cobrarse la deuda. La Policía española colabora con la colombiana en la investigación.