La cantera del Carmín: romería infantil para despedir el curso en la escuela Peña Careses

Los alumnos desfilaron hasta las piscinas ataviados con camiseta blanca y pañuelo azul, como manda la tradición de la fiesta de julio

Falta poco más de un mes para las fiestas del Carmín y los niños de la Pola ya cogen carrerilla para llegar a la celebración bien preparados. Cerca de 215 alumnos de tres, cuatro y cinco años de la Escuela Infantil Peña Careses participaron este miércoles en su propia romería, un ensayo a pequeña escala de lo que será el festejo de julio.

El centro celebra todos los años la "Romería del Peña", una jornada de convivencia que sirve para ir despidiendo el curso con una mañana de diversión todos juntos. Y en esta ocasión no ha faltado detalle, porque "nos regalaron los pañuelos azules, así que decidimos que los pequeños vinieran con el uniforme oficial de las fiestas, todos con camiseta blanca y el adorno festivo", indica la directora del centro, Lucía Canga, encantada con la colaboración de las familias de los alumnos para que todo saliera redondo. "Se implican muchísimo y se nota", agradece.

A la sesión no le faltó detalle. Los niños salieron desfilando desde el colegio a primera hora de la mañana, acompañados por música de gaita y tambor gracias a la colaboración de los padres de una de las alumnas. Como los mayores con el grupo "Los Cascaos", también ellos recorrieron las calles de la Pola en alegre jolgorio. En su caso, no lo hicieron hasta La Sobatiella, sino hasta la zona verde de la piscina municipal, donde disfrutaron de música, juegos y comilona, en la que no faltaron los bollinos de chorizo o las empanadas típicas de la romería.

Los escolares lo pasaron en grande en la zona de juegos y en el arenero, antes de regresar al centro, de nuevo con música y con la colaboración de la Policía Local para facilitar el tránsito de la comparsa.

Fueron muchos los vecinos que se asomaron a saludar a los pequeños, felices de disfrutar de su día hasta con público. "Esto no lo había cuando yo estudiaba", comentaba un jubilado entre risas a sus compañeros de banco al paso de los niños por el parque. "Es de los mejores días del año", convenía la directora, con la satisfacción de que hasta el tiempo acompañó para festejar el Carmín por adelantado.