Constatan el origen humano de las pinturas más antiguas del mundo, en Málaga

Un equipo de investigadores analiza el interior de la cueva de Ardales, en Málaga.

Un equipo de investigadores analiza el interior de la cueva de Ardales, en Málaga. / PEDRO CANTALEJO-DUARTE

Son probablemente las pinturas rupestres conocidas más antiguas del mundo y ahora un equipo internacional de investigadores ha corroborado el origen humano de las marcas rojas que se descubrieron en la cueva de Ardales (Málaga) y que fueron realizadas hace unos 65.000 años.

Los investigadores, que mantienen que esas marcas no tienen un origen natural, han comprobado además que los neandertales habrían accedido en varias ocasiones a esa cueva para marcar simbólicamente y de una forma intencionada y reiterada una estalagmita localizada en medio de una gran sala.

Los investigadores han corroborado que, a pesar de lo que sostienen las voces científicas más críticas, las marcas rojas que hay sobre la estalagmita son resultado de la actividad humana y que el ocre que utilizaron para hacer esas pinturas lo habrían recogido en el exterior de la cueva.