El Ayuntamiento toma posición para responder a los requisitos del Mundial: la reacción de todos los grupos municipales

l Foro y PP rechazan "hipotecar" las arcas públicas y priman proyectos como Naval Azul y Tabacalera | El PSOE afea el oscurantismo, IU y Podemos ven el plan "inasumible" y Vox pide "valorar el retorno"

Fernando Sordo Madaleno, arquitecto encargado del diseño de la reforma de El Molinón, durante la presentación del proyecto para la adecuación del campo a las exigencias FIFA de cara al Mundial. | Ángel González

Fernando Sordo Madaleno, arquitecto encargado del diseño de la reforma de El Molinón, durante la presentación del proyecto para la adecuación del campo a las exigencias FIFA de cara al Mundial. | Ángel González / Ángel Cabranes

Ángel Cabranes

Ángel Cabranes

El Ayuntamiento de Gijón no esconde la dificultad en la que se encuentra la candidatura de El Molinón para ser sede del Mundial 2030 en el contexto actual. Después de que se conocieran los requisitos FIFA para las ciudades anfitrionas, desvelados por LA NUEVA ESPAÑA, el gobierno municipal se ha pronunciado sobre una serie de condiciones que podrían obligar a un desembolso estimado para las arcas municipales de en torno a los 50 millones de euros. Cantidad que estaría al margen de la partida que se pueda dedicar a la reforma de El Molinón, presupuesta en 150 millones de euros. "Es evidente que las exigencias que plantea la FIFA superan con creces las posibilidades del Ayuntamiento y que, a día de hoy, carecemos todavía de detalles sobre la financiación que plantea el Sporting", señala Jesús Martínez Salvador, portavoz del gobierno formado por Foro y PP.

La Federación Española de Fútbol apremia para presentar garantías económicas de cara a ser sede del Mundial en un momento en el que el gobierno municipal muestra sus reservas sobre, hasta qué punto, las arcas municipale tienen capacidad de participar en la inversión del proyecto. Una situación a la que el Sporting permanece atento, mientras trabaja en vías de financiación, y ciñéndose a lo compartido en los últimos días por Alejandro Irarragorri, presidente del club gijonés: es un asunto de todos, de estar unidos y de trabajar mucho. La sensación, desde el conjunto rojiblanco es la de que aún resta por conocer, a través de un análisis profundo, nivel de gasto y capacidad de retorno de un evento como el de las dimensiones y repercusión del Mundial de fútbol de 2030.

"Siempre hemos sido muy claros en esto: el Mundial sería fantástico para Gijón, pero no a costa de hipotecar el Ayuntamiento", recalca el forista Martínez Salvador, segundo teniente de alcaldesa y concejal de Urbanismo. "Más si cabe en un momento en el que tenemos en desarrollo proyectos clave y prioritarios para la ciudad como Naval Azul, Tabacalera o la ampliación del Parque Científico", añade sobre algunos de los proyectos que tiene entre manos el consistorio y a los que, entre otras cosas, se ha dedicado una parte importante de los presupuestos municipales.

"Dicho esto, nuestra voluntad a la hora de trabajar junto al club y al resto de administraciones de cara a encontrar una fórmula viable sigue intacta", continúa el portavoz del gobierno. Una postura a la que se adhiere el grupo municipal del Partido Popular, que ya ha advertido que la capacidad de inversión del Ayuntamiento es "muy ajustada".

Luis Manuel Flórez, "Floro",, portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento, es crítico con el Gobierno. "Esta organización pide adueñarse de la ciudad y su soberanía quedándosela a cuenta a su antojo. Este nivel de exigencia no parece asumible para una aventura aparentemente atractiva, pero de la que no conocemos ni un detalle de sus posibles beneficios para Gijón. La pasada semana el grupo municipal socialista ya pidió la comparecencia en comisión del concejal de Deportes, donde esperamos que nos explique desde cuándo conocían estas condiciones y en qué márgenes de negociación se está moviendo el Gobierno municipal con la FIFA. Suponemos que no ha iniciado esta aventura sin analizar las consecuencias económicas y el retorno que podría tener para el municipio. Aunque viendo las reacciones del concejal Martínez Salvador, parece que así es. Un gobierno que se lanza a la aventura sin echar las cuentas que todos y todas habremos de pagar. Lo hace además con el oscurantismo habitual", argumentan.

"Quienes tienen que pronunciarse en primer lugar sobre este asunto son los dos gobiernos que firmaron con el Sporting un protocolo sin una sola cifra y sin un solo compromiso de financiación", sentencia Javier Suárez Llana, concejal y portavoz de Izquierda Unida en el ayuntamiento de Gijón. "Esto es a lo que conduce el protocolo firmado. Los 50 millones en los que ahora sabemos que se cifran las exigencias de la FIFA, a los que hay que sumar la inversión para la reforma de El Molinón y su entorno, son, desde luego, inasumibles para el Ayuntamiento de Xixón. Inasumible la cifra, y obscenos algunos de los conceptos que la FIFA pretende que paguemos todos los gijoneses. Hasta ahora el debate ha girado en torno a la oportunidad que puede suponer ser sede del Mundial. A la vista de las últimas noticias, lo que hay que valorar en este punto ya no es la oportunidad, sino la necesidad para nuestra ciudad. Y Xixón tiene muchas necesidades, pero esta no es una de ellas", defiende Suárez Llana.

En una línea similar se expresa Olaya Suárez, concejala y portavoz de Podemos. "Claro que el sueño mundialista es bonito, pero hasta aquí hemos llegado: todo lo que estamos viendo es un auténtico despropósito. Empufar a la ciudad para décadas no es una opción, y menos en estas condiciones: corriendo nosotros con todos los gastos, perdonando todo tipo de tasas y dándole a la FIFA la potestad de borrar el nombre de El Molinón y de nuestra propia ciudad. Nos echamos las manos a la cabeza con el esfuerzo de poner 5 millones para que siga adelante Emulsa o para renovar la flota de Emtusa, ¿y vamos a plantearnos gastar 50 millones que no tenemos, y gastos adicionales, para que se juegue aquí un Costa Rica-Australia? ¿De qué manera nos compensa? ¿Por qué estamos conociendo esto cuando tenemos diez días para firmarlo todo?", señala. "Queremos relevancia para Xixón, apostar por el deporte y el mejor estadio para nuestro Sporting, pero de lo que se está hablando aquí es de una ruina con unas condiciones espantosas y nimio beneficio para la ciudad. Ya está, la broma se acabó aquí", continúa la portavoz de la formación morada.

Vox, en cambio, discrepa, como muestra su concejal, Sara Álvarez Rouco. "Aunque la cifra es impactante, hay que valorar el retorno que va a producir esa inversión, entendemos que elevado, y que la cifra no va a disponerse de la noche a la mañana. Hay que partir de que estamos en 2024 y hasta la celebración del Mundial esa cantidad debería prorratearse en varios ejercicios. Aunque es necesario un estudio pormenorizado de los campos en los que esa inversión devolverá rentabilidad y si la rentabilidad existe sería sorprendente que se renunciase a esta oportunidad de potenciar nuestra ciudad. Estamos acostumbrados a ver cómo salen millones a fondo perdido de las arcas municipales por mala gestión, como ocurre, por ejemplo, con las empresas municipales sin que nadie se responsabilice y nos asustamos al hablar de 50 millones distribuidos en varios años que van a volver a la ciudad con creces gracias a la rentabilidad que tiene un evento deportivo de ese calibre", expone la portavoz del partido de Abascal en el ayuntamiento de Gijón.

Suscríbete para seguir leyendo