"En esta categoría es muy complicado ganar fuera de casa y la Ponferradina será un rival muy complicado, pero vamos con la idea de sumar los tres puntos". El Sporting de los guajes no se arruga ante ningún reto de los muchos que le plantea esta categoría. Pablo Pérez anuncia que los rojiblancos intentarán tomar al asalto El Toralín y convertirse en el primer equipo que arranque los tres puntos del feudo berciano. "Tenemos que hacer nuestro juego con intensidad y que si hacemos las cosas como sabemos, saldrán bien", sostiene el mediapunta formado en el colegio de La Inmaculada.

Pablo Pérez encabeza la tabla de goleadores rojiblancos con siete tantos a pesar de que no es un titular habitual en las alineaciones de Abelardo. Fiel a su estilo sencillo y humilde, el goleador resta importancia a su condición de "pichichi": "Es un dato anecdótico al que no hay que dar mucha importancia, estoy contento por meter goles y, sobre todo, por poder ayudar al equipo. Al final da igual quién los meta". El vestuario es una piña, con muchos futbolistas que han crecido sintiendo los colores del Sporting. Pablo Pérez es un goleador atípico, un tipo inconformista que se exige demasiado: "El día del Betis tuve una ocasión clarísima que la hubiese cambiado por el gol ante el Numancia, que no valió para nada". Su facilidad para anotar llegando desde atrás no es algo nuevo. "En categorías inferiores metía muchos goles, en los dos años de Segunda B metí seis, así que este año sería el récord", bromea, como lo hace con su inesperado dominio del juego aéreo: "Los remates de cabeza nunca fueron mi fuerte. Estoy sorprendido yo mismo por llevar tres goles así y otro con el hombro". A Pablo Pérez los goles no se le suben a la cabeza.