Washington / Londres

España crecerá a partir de 2013 por encima de la media de la eurozona, y en concreto más que Alemania, Francia, Holanda e Italia, según el último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), divulgado ayer. El FMI mejora ligeramente las previsiones para la economía española para los años 2011 y 2012, y avanza que el crecimiento del PIB español será superior al 2% a partir de 2013, recuperando los niveles de riqueza anteriores a la crisis. El jefe de departamento de Europa del FMI, Jorg Decressin, explicó al diario «El País» que hay «signos evidentes de que España está ajustando con rapidez algunos de los desequilibrios acumulados en los años del boom». Hasta 2013, no obstante, «el escenario central sigue siendo una recuperación débil, frágil, que se reflejará por ejemplo en una caída del paro muy gradual».

Hans Blommestein, responsable de bonos y deuda pública de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), criticó en el «Financial Times» el comportamiento de los inversores, que ha provocado fuertes oscilaciones en la rentabilidad de los bonos emitidos por los gobiernos de Grecia, Irlanda, Portugal y España.

Los inversores en deuda pública de los países de la zona euro actúan obedeciendo «instintos animales» cuando juzgan los riesgos reales de impago en la región, lo que da lugar a una situación en la que los mercados financieros podrían forzar a los países más débiles a incurrir en recortes presupuestarios excesivos, afirmó el directivo de la OCDE. «Los mercados están creando una situación en la que los países pueden verse forzados a ir demasiado lejos en la introducción de medidas de austeridad negativas para sus economías y que pueden sofocar el crecimiento», añadió Hans Blommestein.