Entrevista | Joffre López Oller Sociólogo, autor del Informe sobre la situación residencial de la población joven (16-34 años) en Xixón

"Que la gente joven no pueda emanciparse genera problemas que nos afectan a todos"

"La población inmigrante, de España o de fuera, es la que eleva la tasa de emancipación en Gijón"

Joffre López Oller.

Joffre López Oller. / Marcos León

El sociólogo catalán Joffre López fue hasta hace poco responsable del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España. Ahora ha centrado su investigación en Gijón por encargo de IU. Las cifras de su informe sobre la situación residencial de los jóvenes gijoneses no dan para ninguna alegría. Solo unos datos: la edad media de emancipación está en 29,4 años, solo el 11,3% de los menores de 29 años nacidos y que siguen viviendo en Gijón están emancipados y a la hora de optar por alquilar o comprar pocas son las diferencias porque ninguna opción es posible cuando hay que dedicar entre el 50 y el 62% del sueldo para conseguirlo.

–En su informe no para de salir la palabra inviable. ¿Tan dramática es la situación?

–Si, cuando se tiene un salario de mil euros no se puede acceder a una vivienda. Ni alquilar ni comprar. ¿Qué hipoteca te van a dar por mil euros? Y en el caso del alquiler, y con unos precios que están por las nubes, habría que dedicar hasta el 60% del salario. ¿Qué propietario alquila pensando que solo vas a poder pagar dos meses? Es inviable desde el punto de vista económico. Y ya no digo lo que significa a nivel social y a nivel personal. Saber que tienes un trabajo y no puedes tener una vivienda es muy frustrante.

–Tal vez haya que buscar alternativas al comprar o alquilar.

–Para los jóvenes las alternativas son las viviendas cedidas por algún familiar o la vivienda compartida. Todos hemos compartido vivienda en algún momento pero como situación de paso; no como una forma de vida permanente. Y ahora es una de las pocas salidas que tienen.

–¿El reto es actuar en el mercado laboral o en el de la vivienda?

–En los dos a la vez porque en algunos sitios aún cobrando dos mil euros no se puede llegar a una vivienda. También ocurre que poniendo vivienda protegida a precios asequibles la gente joven no puede acceder al no tener ningún tipo de ingresos. Hay gente joven que vive totalmente a expensar de sus padres o de becas o cosas así.

–Pero el problema de los malos sueldos es en todas las edades.

–Pero los jóvenes tienen puestos más precarios. Ya en los años sesenta se hablaba de un mercado de trabajo primario y otro secundario. Un primario con estabilidad y garantías y un secundario que era itinerante. Este mercado ahora se alimenta de gente joven e inmigrantes con poca cualificación y en sectores que no dan mucha estabilidad.

–¿Qué diferencias encontró al analizar Gijón respecto a lo que ocurre en el resto de España?

–Hay mucha gente nacida en Gijón pero que vive en otros sitios y que está emancipada. Con ellos la tasa de emancipación en menores de 29 años está en el 48,7% cuando la tasa de los nacidos y residentes en Gijón es del 11,3%, muy poco realmente. Tu vas a Madrid o Barcelona y ves gente joven que no es de allí, que son de Galicia, de Castilla-León, de Asturias... Son lugares que por estudio y trabajo atraen a mucha población joven y esa población se emancipa y queda allí. Por eso la movilidad vinculada a la emancipación es muy importante. Muchos territorios expulsan a su población joven y esa población ya no regresa.

–¿Asturias es de esas que expulsan a sus jóvenes?

–Si

–También analiza la emancipación de los jóvenes que viven en Gijón no siendo de aquí.

–La tasa de emancipación en los nacidos en el resto de Asturias es del 42%, del 37,4% en los nacidos en otras comunidades autónomas y del 50,9% en los nacidos en el otros países. Esa población inmigrante, sea de España o del extranjero, es la que hace subir la tasa global de emancipación. Si Gijón tiene más tasa de emancipación que Asturias es porque tiene más población joven que ha venido de fuera.

–¿Se distingue entre quienes vienen a estudiar o a trabajar?

–No pero si hemos hecho un trabajo a la inversa viendo a esa población joven que teóricamente no está emancipada y consta como residente en Gijón pero que está estudiando en otras comunidades autónomas con lo que están emancipados. Una emancipación que solo dura el curso escolar. También hay, aunque son muy pocos, jóvenes totalmente autónomos a nivel económico pero que se quedan con sus padres para cuidarlos.

–A la hora de emanciparse, ¿alquiler o compra?

–Aunque los tipos para una hipoteca han subido como los precios del alquiler han subido mucho más a priori sale más a cuenta comprar que alquilar. Pero comprar no es solo pagar la hipoteca y hay una serie de condiciones de ahorros, estabilidad laboral, garantías que poca gente joven puede tener. La ventaja del alquiler es qu e no te exige aportar una entrada económica, que es un importante escollo.

–Se pensaría que comprar una vivienda para toda la vida no es la opción que más casa con ser joven.

–La decisión entre comprar o alquilar debería ser una opción de estilo de vida de cada uno. La tenencia no debería generar desigualdad en el conjunto de la sociedad y es lo que está sucediendo. Hay estudios que demuestran que la población que vive de alquiler sufre más pobreza y vive en peores condiciones. Se está introduciendo en la sociedad un factor de desigualdad que es el tipo de vivienda en el que vive. El riesgo de soberendeudamiento es mayor en alquiler y eso genera problemas muy graves.

–¿Es tan complicado para un joven poder alquilar en Gijón como lo es para alguien en Madrid o Barcelona?

–Es verdad que aquí la media de precio está en unos 700 euros y en Barcelona puede estar en 1.200 pero pero me cuesta imaginar una ciudad donde los jóvenes no tengan problemas para emanciparse. Quizás en Extremadura pero allí el problema es que no hay empleo así que aunque la vivienda sea más barata no hay para pagarla. En términos de accesibilidad económica la situación de Gijón no es muy diferente a la de otras ciudades.

–¿Qué le tocaría hacer a un ayuntamiento para revertir esta situación?

–Actuar en el mercado labora para crear empleos suficientemente dignos que permitan que una persona pueda vivir de los ingresos de su trabajo porque no puede ser que el 25% de la gente joven que trabaja sea pobre. Y, en cuanto al mercado de vivienda, crear alternativas de vivienda protegida, sea del tipo que sea. Las ayudas puntuales al alquiler cubren necesidades urgentes, son algo para el corto plazo.

–Entiendo que no poder emanciparse antes de los 30 será una rémora que marque el resto de la vida.

–Compararnos con nuestros padres es engañoso y frustrante. Si te emancipas con 30 años irá todo muy desacompasado. ¿Vas a seguir pagando la hipoteca cuanto tengas 70 años? Pero los efectos no son solo para ellos. Si tenemos menos hijos, ¿qué pasa con la estructura demográfica? ¿qué pasa con el sistema de pensiones. Tendemos a individualizar los problemas pero que la gente joven no pueda emanciparse genera problemas sociales que afectan a todos. Esto no va de que los jóvenes lo pasan mal, cumplen 30 y nos olvidamos. En ellos cristalizan todos los problemas que tenemos en la sociedad.

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