si yo fuera alcalde...

El "problema" de ser alcalde de pueblo

Los vecinos de Soto del Barco demandan sendas peatonales, intervenciones en seguridad vial y una intensificación de los servicios de limpieza

Por la izquierda, Roberto González, José García, Manuel Álvaro Pulido y Ramón Nieto. | María Fuentes

Por la izquierda, Roberto González, José García, Manuel Álvaro Pulido y Ramón Nieto. | María Fuentes / I. M.

I. M.

El concejo de Soto del Barco llega a las elecciones municipales del próximo 28 de mayo con uno de los mayores cambios de los últimos treinta años: el alcalde Jaime Menéndez Corrales se jubila y no se presenta a la reelección.

Tras varias mayorías absolutas desde que llegó a la Alcaldía del municipio por primer vez –en 1991–, primero como candidato del PSOE y después como líder de la CISB (Candidatura Independiente Concejo Soto del Barco), Menéndez Corrales, el decano de los alcaldes de Asturias, ha decidido colgar las botas. Le sustituye como candidato Jaime (Jimi) Pérez Lorente. Sin embargo, Menéndez Corrales cierra la lista. La CISB cuenta actualmente con 6 de los 11 concejales que forman la Corporación.

El PSOE, con cuatro concejales, confía una vez más en Omar Suárez Valdés para liderar la lista y, el PP, que tiene un edil, estrena candidata con Beatriz Granda.

Otras tres formaciones políticas sin representación municipal acuden a las elecciones municipales del 28 de mayo: Convocatoria por Soto del Barco IU-Más País-IAS, con Miguel Ángel López García de numero uno. Vox, con José Luis García Prada y Agrupación de Electores San Juan de La Arena Sí, con Jaime Luis Fernández Argudín de cabeza de lista. En total, seis candidaturas para un municipio que ronda los 4.000 habitantes.

Mientras los partidos políticos intentan convencer a sus electores, en la cafetería de la calle La Magdalena de Soto del Barco, y rodeados de peregrinos del Camino de Santiago, Ramón Nieto, Roberto González, José García y Manuel Álvaro Pulide, entre cafés y cervezas, debaten sobre las necesidades del concejo y lo que harían ellos si fueran alcaldes.

"Ser alcalde en un pueblo es un problema, hay mucho que hacer pero, según la gente, parece que los alcaldes de turno no hacen nada y sí, sí lo hacen", explicó Ramón Nieto. "Yo nunca sería alcalde porque desaparecería del mapa", aseguró totalmente convencido.

Manuel Álvaro Pulido le da la razón a Ramón Nieto. "Estoy de acuerdo con Ramón, es difícil ser alcalde y que todos los vecinos estemos de acuerdo con su política". Pero Pulido se lanza a dar ideas sobre lo que haría él si llegara a tener el Bastón de mando del municipio. "Creo que si fuera alcalde para mí todos los vecinos serían iguales. No acepto que el alcalde de turno no mida a todos los vecinos con la misma vara. Todos somos iguales", aseveró. Él tiene algunas ideas que trataría de materializar: "Intentaría hacer todas las cosas que faltan que son muchas. La más importante para mí sería un paseo peatonal desde el cementerio a El Castillo, por la vera del río. Es una obra para la que se necesita poco dinero y creo que sería fácil de ejecutar", manifestó.

"Yo haría un paseo peatonal entre Casa de Putin y Casa de Paca del Fanco, osea desde la carretera general hasta la zona de El Curión, explica José García. "Es una zona que necesita un mejor acceso para las personas que tienen dificultades de movilidad".

"También pondría vallas de seguridad en la zona de abajo del puente de entrada a Casera. Es un sitio peligroso para los coches, corres el riesgo de acabar en la vía del tren", una propuesta de José García que aplauden todos los presentes. "Es una zona verdaderamente peligrosas" aseguran todos.

Roberto González tiene claro que es necesario "mejorar el pueblo en general y sobre todo la limpieza por parte del Ayuntamiento en todas las localidades del municipio". Pero lo que más alarma a Roberto González es el mal estado del campo de fútbol de Soto del Barco. Los vecinos llevan años reclamando el arreglo del terreno de juego de El Quintanal, que es de arena, por otro de hierba sintética.

"Si fuera alcalde, desde luego arreglaría el campo de fútbol de Soto del Barco que está totalmente abandonado. Yo jugué al fútbol años, desde guaje, en el Club Deportivo Soto del Barco y había mucha animación en el pueblo por los partidos. Ahora es un arenal, no se puede jugar y así llevamos años. Es una vergüenza, los clubes tienen que jugar en otros campos", se quejó Roberto González. "También hay que ofrecer a los vecinos más instalaciones deportivas", reclamó.

Soto del Barco lleva más de una década reclamando un campo de fútbol digno.

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