La Cámara de Comercio propone unir la promoción y gestión de todas las estaciones de esquí de la Cordillera Cantábrica

"Hay que abrir el ángulo y buscar la potencialidad de la montaña asturiana", afirma Paniceres, que llama a aprovechar el "tirón" de la telecabina de Pajares

Barbón y Paniceres, en el telecabina de Pajares. | C. M. B.

Barbón y Paniceres, en el telecabina de Pajares. | C. M. B.

David Orihuela

David Orihuela

La Cámara de Comercio ha fijado en 12 millones de euros el impacto económico en el valle de Lena de la nueva telecabina de la estación de esquí y montaña de Valgrande-Pajares. Un éxito rotundo ya que apenas ha estado en uso unos meses. Se inauguró el pasado 28 de diciembre para los turistas y los esquiadores la han utilizado apenas dos meses.

Con estos datos sobre la mesa, la entidad cameral tiene claro que hay que ir a más. Se trata no ya de vender una estación sino todo un dominio esquiable, el de toda la montaña cantábrica, con Valgrande-Pajares, Fuentes de Invierno (Aller) y Leitariegos y San Isidro, en León, ésta última a muy poca distancia de Fuentes de Invierno con la que debería unirse en un futuro si se cumplen los planes.

Carlos Paniceres, presidente de la Cámara de Comercio, pone como ejemplo lo que se ha hecho con Aramón, una sociedad anónima participada a partes iguales por el Gobierno de Aragón e Ibercaja, que gestiona la mayoría de las estaciones de esquí de esta comunidad autónoma. Aramón es el primer grupo empresarial español de turismo de nieve y montaña. El grupo gestiona cinco estaciones: Cerler, Panticosa y Formigal en el Pirineo, y Javalambre y Valdelinares, en el Sistema Ibérico turolense. Paniceres cita también ejemplos de Andorra o los Dolomitas, en Italia, “donde no vas a una estación solo sino a un enorme dominio esquiable en donde las estaciones pueden estar o no unidas por remontes”.

“Hay que captar esquiadores y turistas de fuera de Asturias y de España y eso se hace con una estratega conjunta”, insiste Paniceres que entiende que hay que incrementar la llegada de esquiadores de León, Galicia o Portugal pero también de otros lugares más lejanos como Madrid. “Tiene todo el sentido hacer una oferta turística desde el punto de vista de las estaciones de esquí de la montaña Cantábrica”, subraya el presidente de la Cámara que considera fundamental “aprovechar el tirón de la telecabina de Pajares y de la llegada del AVE”.

El Principado, lo ha repetido una y otra vez el Presidente, Adrián Barbón, quiere desestacionalizar las estaciones de esquí. Para ello, dice Paniceres, “hay que paquetizar el producto y hacer promoción, abrir el ángulo y buscar la potencialidad de la montaña asturiana”. Esos paquetes deberían presentarse “en los grandes mercados turísticos”. Paniceres vuelve al AVE, ya que no lo ve solo como una oportunidad para que acudan a las estaciones de esquí asturianas aficionados de Madrid que ahora viajan en Ave hasta León y en un futuro lo harán hasta Pola de Lena. “La alta velocidad nos va a permitir tener usuarios en esas montañas durante todo el año”, asegura el presidente de la entidad cameral que lleva tiempo repitiendo que “hay que hablar de actividades de montaña más allá del esquí, que como hemos visto esta temporada pude reducirse a dos meses al año”. En su opinión “las estaciones están cerca unas de otras. Pajares y Fuentes están a apenas una hora, y se pueden ofrecer a los turistas, en invierno y en verano, como un producto conjunto”. 

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