Las dinastías familiares en la tonada de Aller

Una de las señas de identidad del concejo de Aller es sin duda su impronta en la tonada, son escaso los concejos que aportan su propio estilo si exceptuamos las pravianas, las carreñanas o las cabraliegas. Otro signo destacado de la identidad allerana es la proliferación de las sagas familiares como intérpretes de tonada, de las cual es no hay semejanzas tampoco en ningún otro municipio asturiano.

Cronológicamente y una de las más destacadas por el éxito es la de Pepe Requejo en 1948, al alzarse con el titulo de campeón en el certamen del diario"Región". Es su saga familiar de Moreda, con otros dos hermanos: Tino y Jesús. Tino fallecido prematuramente, pero ya había dejado una huella especial con la interpretación de "Pola y el Pino".

Las hermanas Fernández Muñiz de Felechosa, Veneranda –primer premio en 1951 y segundo en e1948 del citado certamen– fueron toda una revolución. Posteriormente se incorporaría en 1955 su hermana Concha, alcanzando también puestos de honor. Parientes de las citadas eran los hermanos Rodríguez Muñiz, de Felechosa, con David como principal referencia, ya que fue semifinalista en 1955, Lucinda semifinalista en 1966 y Félix participante en 1966.

Una saga familiar muy destacada en la canción asturiana es sin duda la de Ataúlfo Lada Camblor y su sobrino Maximino Solís Lada de Orillés, dos excelentes cantantes en distintas épocas, con abundantes primeros premios en su balance profesional. En Rucao estaban los hermanos Ramón y Antonio Álvarez.

Los hermanos Vázquez Sánchez (de Boo), José y Salvador, tuvieron una actuación notable, con José semifinalista en 1955 y Salvador que llegó a ser vencedor del Concurso y Muestra "Ciudad de Oviedo". Del mismo pueblo de Boo destaca la aportación de Ricardo Díaz y su hija Beatriz, ésta última giraría posteriormente al género lírico. La saga más numerosa es la protagonizada por los cuatro hermanos González de Arnizo: Mª Leonor, Antonio, Serafín y Celestino. Curiosamente en el análisis de su actuación en el concurso de 1966 se destaca la actuación de Mª Leonor y se silencia la de Celestino, la que sería una de las mejores voces de la canción asturiana.

Al margen del concejo de Aller son contadas las dinastías existentes en otros municipios. Recordamos la de los hermanos Noriega, José y Nieves de Villaviciosa. Los hermanos García Palicio, de Frieres(Langreo) quizá la más brillante con dos sobresalientes intérpetres, Laudelino y Enrique. En Cabaños (Langreo) estaba Obdulia Gonzalez y su hijo, el "Che de Cabaños".

Finalmente, mencionar por su curiosidad, la masiva inscripción familiar en el concurso de 1948 de nada menos que seis hermanos (Aurelio, Avelino, Aquilino, Josefa, Valentín y Valeriano), naturales de Gijún (Siero), de los cuales tres finalmente no se presentaron.

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