En territorio comanche

La opinión sobre el Oviedo y el Sporting: El balón y la ansiedad

Unos aguantan en el segundo puesto y otros remontan para colocarse a cinco puntos del play-off: las calculadoras echan humo y los sueños comienzan a humedecerse

Pablo González

Pablo González

Toca balance una vez cerrada la semana "furgolística". El Sporting solo ha podido sumar dos puntos ante dos de los equipos que comandan los puestos de descenso. Pero, aun así, los de MAR resisten en la segunda plaza. ¿Ha llegado el temido bache? ¿O hay que quedarse con eso de que en Segunda no hay rival pequeño? Sea como sea, los rojiblancos acumulan ya seis partidos sin perder desde aquella visita a El Sardinero en la que merecieron más ante el Racing de José Alberto.

La jornada en lo que nos afecta, amiguinos y amiguinas, la cerró el Oviedo firmando una remontada ante el Eibar, uno de los equipos más en forma de la Liga. Los tres puntos seguro que servirán para disparar la ilusión y la ansiedad: el play-off está a cinco puntos y el ascenso directo a siete. Los azules viajan a Miranda y luego reciben al Espanyol, así que las calculadoras echan humo y los sueños comienzan a humedecerse.

Mientras, a unos kilómetros de distancia dependiendo del punto de origen, el que quiere volver a ser el tercer equipo de Asturias se ha metido en más problemas de los previstos. Sánchez Murias se estrenó como técnico en el Avilés, pero los del Suárez Puerta acabaron perdiendo. Ya están luchando por librarse del descenso y no por jugar el año que viene en Primera Federación, que era el objetivo veraniego. La grada pide la cabeza de Vidales y habrá que ver si los llamamientos a la calma de la propiedad surten efecto. Cuando hay un balón por el medio, todo el mundo se pone nervioso y no hay memoria histórica que lo resista. Así que solo queda aguantar hasta el siguiente domingo a ver si escampa, ¿oyisti, güey?

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