Rescatan con una moto de agua a un monitor de una actividad de kayak

Salvamento tuvo que ayudar a salir del agua a los alumnos del Emilio Alarcos en la zona de Fomento por las malas condiciones del mar

Pablo Palomo

Pablo Palomo

Importante susto ayer al mediodía en la lámina de agua de Fomento, donde varios estudiantes del instituto Emilio Alarcos practicaban kayak junto a sus profesores, en el marco de una actividad impulsada por la Federación de vela. La actividad había partido del espigón central de Fomento, donde se encuentra el edificio federativo. Si bien, las condiciones del mar, especialmente espoleado por las grandes rachas de viento que hubo ayer en Gijón, les dificultó su regreso al punto de partida. Uno de los profesores del centro llegó, incluso, a caer al agua y tuvo que ser rescatado por un socorrista en moto de agua. El Servicio de Salvamento tuvo que ayudar al resto de los alumnos a salir del agua, pero lo hicieron por sus propios medios y no hubo que lamentar daños mayores. Ni hubo víctimas, ni tampoco heridos.

Los hechos tuvieron lugar pasada la una de la tarde. Los jóvenes que practicaban la actividad en kayak pertenecen al instituto Emilio Alarcos. Participan en actividad impulsada por la Federación de Vela. Según confirmaron fuentes municipales, las fuertes rachas de viento se lo pusieron complicado a los participantes para poder volver al espigón central de Fomento y fue necesaria la intervención del personal del Servicio de Salvamento municipal. Este se encuentra activo desde el pasado 1 de mayo, la fecha en la que arrancó la temporada de baños. Además de en Poniente, gracias al inicio de la temporada, hay servicio de Salvamento tanto en San Lorenzo como en el Arbeyal.

Se vivieron ciertos momentos de tensión, puesto que uno de los monitores llegó a caerse al agua. Lo normal en este tipo de actividades es que los participantes lleven chaleco salvavidas. No obstante, la rápida intervención de los socorristas, que acudieron a por él con una moto de agua, evitó mayores complicaciones. Por su parte, los socorristas echaron una mano a los adolescentes para poder salir del agua, logrando así que todo quedara en un susto. Un susto que se convierte en el primero de la temporada de baños. Lucía ayer bandera amarilla en las playas de Gijón debido al aire que hizo ayer y antes de ayer. Los profesionales de la Unidad de Buceo de Ferrol, que participó el miércoles en una recuperación de obuses en el cerro de Santa Catalina, comentaron a su salida del agua lo dificultosa que se hizo la operación debido a las fuertes rachas de viento. "Había que agarrarse como pulpos", dijo uno de los militares.