El Paragües

Conserje

La jubilación de Alberto García, figura clave en los colegios de la Pola

Vicente A. Montes Álvarez

Vicente A. Montes Álvarez

Hay personas que con trabajo sencillo tienen una relevancia fundamental en los ámbitos donde ejercen sus quehaceres. Nuestros colegios públicos Celestino Montoto y Hermanos Arregui, junto al equipo docente, que es lo que más visualizan las familias que usan sus servicios, pueden funcionar por personas que apenas se ven y que posibilitan la puesta a punto diaria de las instalaciones. La parcela en la que están situados los centros que supera los 17.800 metros cuadrados, de los cuales la mitad es césped, exige un esforzado mantenimiento. Cada uno de los edificios, de 1.330 metros cuadrados, obliga a una atención esmerada a cubierta, servicios, calefacción ... Alguien lo atiende por designación municipal. Esa persona es "El Conserje".

Desde la construcción de los centros, cuatro personas realizaron esa función. Ramón, Avelino y Alberto, el último, fueron quienes más tiempo tuvieron ese cargo. Alberto García a partir de hoy deja de hacer esa faena. Se echará de menos su diligencia en buscar soluciones a los contratiempos, su disponibilidad para solventar contrariedades y su trabajo eficiente y silencioso. Sé que alguien lo sustituirá y probablemente con su misma eficacia, pero su amor a la naturaleza y su lucha por colocar las plántulas de castaño, cerezo o avellano donde pudiesen progresar, son genuinos de Alberto. Sean esta líneas un homenaje a las personas que como Ramón, Avelino o Alberto hicieron posible que otros, como es mi caso, pudiésemos realizar nuestra labor centrándonos solo en nuestra tarea específica. Y...¡Feliz y larga jubilación!