La marcha de Christian Ferreres al Villarreal ha creado un profundo malestar en el Sporting, que reclamará los derechos del jugador al Consejo Superior de Deportes, y además también ha denunciado al jugador y al club castellonense al Comité de Competición, con lo que Ferreres podría ser inhabilitado y el Villarreal recibir una sanción de puntos. "Es un robo, pelearemos hasta el final, como club de canterano que somos tenemos que defendernos", explica Ramón de Santiago, consejero del Sporting.

En el Sporting consideran "un robo" la maniobra del Villarreal, y recuerdan la declaración de Fernando Roig, en abril de 2019, en los micrófonos de Movistar tras un partido, en el que se quejaba de que otros equipos le arrebataban jugadores jóvenes. "Nuestra cantera, yo creo, es la mejor de España. Por eso vienen todos los equipos de España a robarnos jugadores. Desde aquí lo denuncio públicamente: me parece fatal que los grandes equipos se dediquen a robar jugadores de quince años con contrato, antes de llegar a profesionales. Que quede ahí, que conste. ¿Nombres? Barcelona, Atlético de Madrid y Athletic de Bilbao. Uno cada uno”, manifestó Roig.

Ferreres anunció el pasado lunes por la noche que ponía fin a su etapa en el Sporting. El club rojiblanco mantenía un conflicto con el Villarreal desde el verano, como destapó LA NUEVA ESPAÑA, por la intención del jugador de irse al conjunto castellonense, y que se amplió aún más ya que ambos habían tramitado su ficha. El Sporting defendía su derecho de retener al jugador al igualar la oferta del club castellonense para hacerle un contrato profesional. El Comité Jurisdiccional de la Federación se pronunció dándole la razón al Villarreal, y abriendo un nuevo proceso para dictaminar ahora la indemnización que el Villarreal debe pagarle al Sporting por los derechos de formación. Una cifra que estaría estipulada en unos 40.000 euros por un contrato como profesional que Ferrerres ha firmado con el Villarreal y que tiene una cláusula de rescisión de 18 millones.