Podemos ha remitido a las fuerzas que negocian la reforma del Estatuto de Autonomía una contraoferta fiscal para tratar de doblegar la posición de Foro y “desbloquear” el proceso de discusión. El nuevo portavoz parlamentario de la formación morada, Rafael Palacios, y la flamante coordinadora autonómica, Sofía Castañón, presentaron esta mañana su propia visión del condicionante impositivo que han planteado los foristas, titulares del voto decisivo para alcanzar los 27 que darían de paso el nuevo Estatuto en la Junta. Toca poco el Impuesto de Sucesiones, sobre el que Foro sugiere una supresión de facto que Palacios entiende poco conciliable con una postura “progresista”. Avanza que, tal y como está configurado, el tributo de las herencias “únicamente está afectando a las grandes fortunas”. Asegura que sólo hay unos doscientos herederos directos que hoy pagan el impuesto y que por eso su propuesta casi no lo modifica. Plantea, eso sí, en el contexto de la lucha contra la despoblación rural, que se establezca una bonificación en la cuota por la adquisición “mortis causa” de una vivienda habitual en la zona rural.

La contraoferta morada se centra en la progresividad de otros tributos que Foro también plantea modificar, el IRPF y los impuestos de donaciones y transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados. Proponen reducir el tipo impositivo que se aplica a las donaciones inferiores a 300.000 euros dentro de los grupos de parentesco directo (descendientes, ascendientes y cónyuges) y respecto al impuesto sobre la renta, hacer más progresiva la escala actual, fruto de “un pacto entre PSOE y PP para los presupuestos de 2015”, destaca Palacios. En su nuevo planteamiento, donde la propuesta de Foro hablaba de una rebaja de los tipos en las rentas de hasta 60.000 euros –lo que supondría “una merma notable de la recaudación”, según Podemos– se sugiere concentrar la reducción en los tres primeros tramos, es decir, en las rentas de menos de 30.000 euros.

En el impuesto de trasmisiones patrimoniales, aplicable sobre todo a compraventa de vivienda usada y vehículos, Podemos propone reformar la situación actual –en la que “pagan el mismo tipo todas las viviendas de menos de 300.000 euros”– imponiendo tipos reducidos para operaciones por debajo de 175.000, además de un tipo de gravamen propio del 6,5 por ciento para la adquisición de la primera vivienda habitual de los menores de 35 años con rentas inferiores a 25.000 euros y otro del tres para la misma situación en familias numerosas con ingresos que no alcancen los 45.000.

Podemos plantea éste como un documento abierto, sin líneas rojas, sobre el que espera una respuesta afirmativa de sus interlocutores que ya no tiene por qué llegar como máximo el próximo lunes. El 31, afirma Palacios, “era una fecha, un hito más” y asumiendo que la reforma no se puede demorar por los plazos de la legislatura en la Junta y en el Congreso de los Diputados, el objetivo es que “la mesa siga viva”.