Condenan a Podemos a readmitir a un empleado que despidió y presionó en su labor sindical

Podemos deberá readmitir al trabajador del partido en Asturias que fue despedido por organizar unas elecciones sindicales en la formación con el argumento de que lo hacía a mala fe. El juzgado de los Social número 3 de Gijón considera, por un lado, que la condición laboral indefinida del trabajador despedido (que había participado en la candidatura de Daniel Ripa) era independiente de su inclinación a una u otra corriente interna, y que por tanto estaba en su derecho de organizar unas elecciones sindicales. Dado que el trabajador despedido ejercía tareas administrativas, Podemos le exigió como tarea propia de su trabajo que rectificase la información remitida a la UMAC relativa a las citadas elecciones sindicales. Podemos ponía en cuestión el número de trabajadores que participaron en ese proceso, porque ya el partido en Asturias estaba inmerso en una secuencia de ceses de personas adscritas a la dirección anterior a la de Sofía Castañón, la que encabezaba Daniel Ripa.

La sentencia, a la que ha tenido acceso este periódico, desvincula el debate de las disputas políticas internas y se ciñe exclusivamente a la relación laboral entre el demandante y el partido. Y es en ese contexto en el que el juzgado considera que Podemos actuó con injerencia en el núcleo de la actividad sindical "lo que constituye una evidente injerencia ilegítima de la actuación de la empleadora que no puede tener justificación en sus facultades directivas". Para el juzgado, la actuación del trabajador, "se desarrolló dentro de los márgenes que delimitan el legítimo ejercicio de sus derechos fundamentales de libertad sindical", y que ese desempeño de la representación sindical "no puede suponer causa lícita de extinción del contrato".

Es decir, Podemos defendía que podía dar instrucciones al trabajador que ejercía como administrativo para que alterase información remitida como representante sindical. Es por eso que el sector crítico de Podemos, vinculado a la candidatura de Daniel Ripa en las pasadas primarias, considera que "podemos se convierte en el primer partido condenado en Asturias por vulneración de la libertad sindical".

La sentencia declara nulo el despido, obliga a readmitirlo en su puesto de trabajo, abonarle los salarios pendientes e indemnizarle con 6.251 euros. La actual dirección de Podemos, en manos de Sofía Castañón en Asturias y de Ione Belarra en España, defendía las causas de despido del trabajador que ahora debe ser readmitido.

Fuentes próximas a la actual dirección de Podemos, en manos de Sofía Castañón, indicaron que la dirección "no va a arrastrar el nombre de esta organización en la prensa" y que "hay tres sentencias que dicen que esas elecciones sindicales fueron un fraude". "Dejemos que la justicia siga el curso de los procesos y los recursos antes de valorar".

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