Los vaivenes de PSOE y PP por el ancho de las vías retrasaron más aún la Variante

Los sucesivos gobiernos cambiaron seis veces el criterio sobre la distancia entre carriles, lo que obligó incluso a levantar raíles instalados años atrás

ancho variante

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Ramón Díaz

Ramón Díaz

"La variante de Pajares tiene que ser equipada para tráfico ferroviario mixto de pasajeros y de mercancías; una inversión de esta magnitud (casi 4.000 millones) no se justifica solamente por el tránsito exclusivo de pasajeros". Este argumento, expuesto por los responsables de la Plataforma Tecnológica de Túneles Pajares (PTTP), es el que finalmente se ha impuesto, tras veinte años de discusiones bizantinas sobre el ancho de las vías de la futura salida ferroviaria a la Meseta. Discusiones y enfrentamientos políticos que fueron una de las causas principales del retraso de 13 años que acumula la Variante. Porque hasta seis veces cambiaron los sucesivos gobiernos del PP y el PSOE el criterio sobre el ancho de las vías entre León y Pola de Lena desde que, el 21 de febrero de 2003 el Consejo de Ministros autorizó la contratación de la redacción del proyecto y la ejecución de la Variante, con la promesa de abrirla al tráfico en 2010.

Empezando por el final, la Variante se pondrá en servicio –este año, según el Ministerio de Transportes– con ancho mixto (europeo estándar e ibérico mediante triple hilo) en la vía Este y ancho ibérico con traviesa polivalente (para cambiar cuando así se decida a ancho estándar) en la vía Oeste. Llegar a esta configuración no fue fácil: los vaivenes en torno a los anchos de la Variante fueron constantes.

Cuando empezó a pergeñarse la Variante, en 1980, no había debate: las vías irían con ancho ibérico (1.668 milímetros entre las caras internas de los carriles). La apertura en ancho europeo estándar (1.435 milímetros) en 1982 del primer tramo español de alta velocidad, entre Madrid y Sevilla, agitó el debate sobre qué ancho instalar en los tramos de nueva construcción. Pero ni siquiera entonces hubo discusión en torno a la Variante, porque el elevadísimo tráfico de mercancías, que no estaban preparados para el ancho estándar, obligaba a mantener el ancho ibérico. De ahí que durante los gobiernos de Felipe González y José María Aznar se anunciaran dos vías con ese ancho.

El primer cambio llegó en la última etapa del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. El entones delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, reveló que la Variante abriría con ancho ibérico, y que en una fase posterior se instalaría ancho estándar.

La llegada de Mariano Rajoy al poder supuso un continuo cambio de planes. En 2013 el entonces secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá, anunciaba ancho ibérico en uno de los túneles, que abriría antes que el otro, y dejaba en el aire el ancho del segundo. En 2016 se realizaba un estudio para determinar de forma "definitiva" los anchos. Se analizaron tres alternativas: Variante y León-La Robla en ancho ibérico, Variante en ancho estándar y León-La Robla con triple hilo, y Variante y León-La Robla con triple hilo. Este informe sirvió de base para tomar la decisión –luego revocada– de instalar ancho estándar.

El asunto se complicó en 2017, cuando Foro exigió vías de ancho estándar en los dos túneles de la Variante y que la rampa de Pajares siguiera abierta para mercancías como contrapartida para apoyar los Presupuestos Generales del Estado. Su voto era decisivo. El Gobierno del PP cedió a la exigencia y anunció que los dos túneles de la Variante tendrían ancho estándar, lo que desató las iras de los dirigentes del Principado, que calificaron la decisión de "disparate", "barbaridad", "error histórico" y "despilfarro de dinero público". El "problema" era que ya en 2013 se habían colocado vías en ancho ibérico entre León y La Robla, y al decidirse el Gobierno por exigencia de Foro por el triple hilo hubo que levantarlas, rescindir el contrato, indemnizar a la adjudicataria y aprobar otro proyecto.

En diciembre de 2017, el entonces ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, revelaba en exclusiva a LA NUEVA ESPAÑA que la Variante concluiría en el verano de 2020 y que tendría ancho estándar en los dos túneles y un tercer carril en el otro con ancho ibérico. Pero tras la llegada de Pedro Sánchez al gobierno, en 2018, el nuevo titular de Fomento, José Luis Ábalos, manteniendo la fecha de inauguración en 2020, cambiaba por última vez los anchos: los dos túneles en ancho ibérico y uno de ellos con un tercer carril en ancho estándar.

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