El Principado convoca el concurso de traslados para unas setecientas jefaturas

El proceso normaliza la movilidad funcionarial tras doce años de bloqueo y excluye a los jefes de servicio, que se incluirán en otra convocatoria

M. P.

El Gobierno del Principado ha enfilado el camino de la normalidad en la convocatoria de concursos de traslados y después de al menos doce años de bloqueos ha convocado el segundo proceso anual de adjudicación de jefaturas para facilitar la movilidad de su personal. La publicación de las bases en el Boletín Oficial del Principado (BOPA) dio inicio ayer a los plazos de presentación de solicitudes para cubrir unas setecientas vacantes netas que aún no agotan la oferta de la movilidad funcionarial de los puestos "singularizados", toda vez que las jefaturas de servicio han sido excluidas momentáneamente de la lista y aplazadas para una convocatoria posterior. El momento de cambio que atraviesa la administración tras las elecciones autonómicas aconseja esta maniobra, argumenta el Ejecutivo, que anuncia un nuevo proceso con otras bases para jefes de servicio por la constancia de que el nuevo Gobierno "acometerá con total probabilidad cambios organizativos que afectarán tanto a las consejerías existentes como a las unidades que conforman sus estructuras orgánicas".

De momento, no obstante, esta convocatoria y las anteriores para "puestos base", introducen a la administración autonómica en una cierta "normalidad" –la de los concursos de traslado anuales– que es "de agradecer", afirman algunas fuentes sindicales, después de al menos doce años de anómala resistencia a la convocatoria de estos procesos que permiten a los funcionarios optar a destinos que les interesan más por sus condiciones salariales, porque son más acordes a sus capacidades o están más próximos a su domicilio. Hasta ahora, ese bloqueo generaba insatisfacciones en el personal y un incremento injustificable del número de interinos y puestos ocupados de forma eventual.

En el ámbito de la movilidad quedan, no obstante, algunas asignaturas pendientes para el equipo que se hará cargo de la gestión de la función pública en el nuevo gobierno –bajo mando de la vicepresidenta, Gimena Llamedo– y en el que se cuenta con la continuidad de Miguel Ángel Rodríguez como director general. Entre ellas, el sindicato CSIF menciona, por ejemplo, la regulación negociada de la "superior categoría temporal" de los funcionarios de carrera. La nueva ley de empleo público, pendiente de desarrollo, prevé expresamente esta figura que permite ofertar plazas de forma temporal a trabajadores que dispongan de la titulación y experiencia suficientes y que pueden estar desempeñando tareas por debajo de su capacitación en lugar de buscar, como hasta ahora, a ese personal en el paro.

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