Pardo de Vera: "Es urgente la segunda fase de la liberalización ferroviaria"

La exsecretaria de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Isabel Pardo de Vera, gran conocedora de la historia y avatares de la variante de Pajares, ofreció este viernes en la Cámara de Comercio de Oviedo su visión sobre las comunicaciones asturianas ante un selecto grupo, entre el que se contaba el consejero de Fomento, Alejandro Calvo, y su antecesor, el hoy presidente de la Junta, Juan Cofiño. Pardo de Vera aseguró que "la inauguración de una obra de envergadura técnica internacional como es la Variante de Pajares deja a Asturias en una inmejorable posición geoestratégica nacional y europea, en el marco Atlántico, en un lugar privilegiado con un potencial de proyectos enorme, mirando hacia afuera a través de su costa y hacia dentro a través del tren". Pardo de Vera, optimista, auguró transformaciones de "magnitud revolucionaria si hacemos bien las cosas".

La Variante, añadió, "es una gran oportunidad, un salto cualitativo". Para la exsecretaria de Estado, Asturias debe trabajar "con visión estratégica, pensando en proyectos con un impacto no solo a corto y medio plazo, sino pensando en las próximas generaciones".

El turismo es importante, pero todos los proyectos deben concebirse, indicó, sin perder de vista la emergencia climática y los cambios en la globalización, conciliando el marco de la sostenibilidad y la multipolaridad.

En esta nueva globalización, añadió, España está jugando un papel fundamental, como puerta a África, "tiene capacidad para liderar esa transformación de Europa y nuestros vecinos". Asturias, dijo, cuenta con dos plataformas, como son los puertos de Avilés y Gijón, para apostar por la transición energética. "Lo que veo es que el mar ofrece muchas oportunidades, tenemos una fachada marítima privilegiada". Una oportunidad sería el transporte de hidrógeno, combustible que se postula como idóneo para la movilidad de vehículos pesados y de largo recorrido. "Gijón está posicionada para los conductos de hidrógeno", dijo. Pardo de Vera indicó que "es muy urgente la segunda fase de liberalización del ferrocarril, que permitiría precios más competitivos en la parte oeste del país, ahora penalizada. Eso solo se consigue con competencia". El AVE añadió hace menos necesarios los vuelos a Madrid, más "si somos conscientes de la emergencia climática". La configuración europea, dijo, tiende a los hub (centros). "El avión va a seguir jugando un papel, pero en el área que es idónea", dijo. Se hace necesario conectar el AVE al Aeropuerto de Madrid.

Sin renunciar a la crítica, aseguró que "se han diseñado algunas estaciones ineficientes". La llegada del AVE obliga a reestructurar las bahías de vías de las estaciones de Oviedo, Gijón y Pola de Lena, proyectos ya diseñados. En cuanto a la red de ancho métrico, se mostró partidaria de una reconfiguración, que implique el cierre de estaciones, y a los usuarios de las mismas se les recogería en coche, aunque admitió que es difícil por el miedo a "quedar tirados".

Cofiño le recordó la insuficiente tasa de reposición de las redes autonómica y estatal de carreteras y por el proyecto de una tasa de mantenimiento, amortizando concesiones de peaje. Pardo de Vera indicó que el proyecto de la tasa estaba muy adelantado, "pero no se puede luchar con la política conflictiva. En Europa, el que contamina paga. Sería gestionable, si no hubiera mala política. Los modelos están ahí. En Alemania solo gravan a los vehículos pesados". Y puso otro ejemplo de crítica injustificada, los arreglos de la "Y": "Hemos medido las desviaciones de tiempo y han sido de 6 minutos".

Encuentro con Barbón, horas antes de la conferencia

La exsecretaria general de Infraestructuras y expresidenta de Adif Isabel Pardo de Vera mantuvo un encuentro con el presidente del Principado, Adrián Barbón (acompañada por Carlos Paniceres), horas antes de su conferencia. Pardo de Vera fue cesada de su cargo en el Ministerio tras la polémica por el contrato de construcción de los trenes de cercanías, cuyo diseño finalmente no era adecuado para los túneles de Asturias. En aquel asunto, Barbón fue beligerante y reclamó ceses, y defendía la gestión de Pardo de Vera. El Ministerio terminó teniendo que decidir si la responsabilidad última del "Fevemocho" fue de Renfe o Adif, y optó por mantener al presidente de Renfe y prescindir de Pardo de Vera.

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