La diáspora pide planes de retorno que "no sean elitistas" ni "corten por edad"

Barbón proclama ante el plenario de la emigración española "el nuevo derecho del regreso", una tarea en la que el ministro Escrivá asume margen de mejora

Al presidente del Principado no se le pasó desapercibido el cartel que en el rellano de una escalera del Museo de la Emigración de Colombres dice que "se prohíbe hablar de política". Reproduce los que se colocaban en los barcos que trasladaban a los emigrantes ultramarinos, dice Adrián Barbón que para evitar conflictos en el pasaje, pero ayer, mientras en el vetusto edificio de la Quinta Guadalupe arrancaba el tercer pleno del octavo mandato del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, Barbón y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en funciones, José Luis Escrivá, se permitieron entre risas la licencia de ignorarlo. Ante los componentes del órgano consultivo y representativo de la migración en el extranjero, unos ochenta llegados desde todo el mundo para su primer plenario fuera de Madrid desde 2012, Barbón quiso renovar sus votos a favor del regreso, de la recuperación de talento y de la necesidad de incrementar representatividad política de la diáspora asturiana mediante la concesión de una circunscripción propia a los 138.207 asturianos que residen en el extranjero. Revitalizó de este modo aquella propuesta suya de dar voz en el parlamento a la emigración, la de aquella cuarta demarcación electoral que planteó en la campaña electoral y que ahora mantiene, pero precisando que de momento a título personal, porque ni forma parte de su acuerdo de Gobierno con IU ni "parece que tenga la mayoría" suficiente para llevarla adelante en la Junta.

Sí proclamó el Presidente el retorno a la tierra de origen como "un nuevo derecho", ligándolo al "problema demográfico" asturiano y asegurando que "debe venir acompañado de medidas económicas" y de estrategias "de incorporación e integración social y laboral" que faciliten el camino de vuelta. Un nuevo derecho, matiza, "que hay que trabajar y defender".

La traslación práctica del eslogan quedará en el ámbito autonómico primero para la ley de impulso demográfico en ciernes, después para el plan "Retornas" que diseña el Principado. En el concierto estatal, Escrivá se adhirió a las reivindicaciones del Consejo respecto a la necesidad de "mejorar las condiciones en las que España os acoge de vuelta" y propuso como remedio las mejoras incluidas en el borrador del Real Decreto Ley que regula la ciudadanía española en el exterior, ahora en fase de audiencia pública y demorado en su tramitación por la interinidad del Gobierno de España. Se crea en ese marco la "oficina del retorno" como una nueva unidad administrativa "que debe ser capaz de canalizar a las distintas administraciones involucradas en este proceso de regreso" que ahora trae de vuelta a España a entre 50.000 y 60.000 personas al año. Pueden parecer muchas, pero "serían más", reconoció, "con una política más ambiciosa y decidida".

A la izquierda, María Antonia Fernández Felgueroso, entre Barbón y Escrivá, con la distinción que recibió. A la derecha, los asistentes al cónclave, durante el acto de apertura. | Ángel González

María Antonia Fernández Felgueroso, entre Barbón y Escrivá, con la distinción que recibió. / ÁNGEL GONZÁLEZ

El Ministro, un emigrante que lo fue "tres veces, en Alemania, Suiza y México", y que en su tiempo fue asiduo del Centro Asturiano en Ciudad de México, fue varias veces autocrítico en su parlamento de bienvenida al Consejo General de la Emigración. Para dar pie a su acto de contrición, marcar el camino del futuro y dar ideas a los políticos, del turno de consultas que le hicieron los miembros del Consejo salió una petición para que los planes de retorno "no sean elitistas", porque muchas veces "cortan a partir de una edad y parece que sólo queremos que retornen los jóvenes". En un buen momento, con el plan asturiano en fase redactora y el reglamento español a consulta pública, Barbón despachó el asunto con un "no lo serán en modo alguno, aquí se acoge a todos por igual", y Escrivá, con un "tenemos que seguir mejorando".

El subrayado de la demanda vino de la mano de Violeta Alonso Peláez, emigrante en Alemania y primera mujer presidenta del Consejo de la Emigración y leonesa que fue estudiante en Asturias. Ella también enfiló el plenario haciendo suya esta necesidad respecto a la necesidad de evitar un retorno "elitista" o restringido. En la diáspora "existe la sensación", señala, "de que siempre se habla de retorno de talento y de una emigración cualificada, y tenemos que dar oportunidades para que regrese también gente mayor o familias, todo aquel que quiera regresar…" "No debe haber diferencias por formación y capacitación", le garantizó también Isabel Castro, secretaria de Estado de Migraciones, para quien en este plenario es de algún modo un retorno, porque ella es madrileña de nacimiento, pero hija de asturiano...

La diáspora pide planes de retorno que «no sean elitistas» ni «corten por edad»

Los asistentes al cónclave, durante el acto de apertura. / Ángel González

El Ministro, por lo demás, había asumido en su turno el margen de mejora abundante que le cabe a España en esta tarea, pero también de la urgencia de perfeccionar los procedimientos de "búsqueda de información" y la coordinación entre las múltiples administraciones involucradas en el retorno. Pero Escrivá también extiende la autocrítica a otras zonas de su discurso y del nuevo decreto que el Ejecutivo tiene en fase de tramitación, y ante otra de las crítica que le llegó del plenario, sobre la insuficiencia del presupuesto destinado a la emigración –"no creció nada en las cuentas más expansivas de la historia de España", dijeron–, replicó con algún golpe de pecho y la voluntad de mejorar. Convencer al Ministerio de Hacienda de que conceda más crédito depende, resalta, de que sean capaces de "mejorar los procedimientos" para la concesión de las subvenciones para los emigrantes que copan el grueso de ese presupuesto. Ahora ese proceso "tiene deficiencias de distinta naturaleza" y para remediarlas está, una vez más, el nuevo reglamento que tramita el Gobierno.

En los debates que ayer y hoy tendrá el Consejo en Asturias ocupará un lugar también, detalla Violeta Alonso, la demanda de facilidades para los estudiantes españoles que hayan cursado el bachillerato en el extranjero, y que en las condiciones actuales son tratados "igual que cualquier otro ciudadano que haya estudiado fuera". Suavizar eso puede ser "otra vía de retorno", destaca. El consejo llega al pleno en Asturias en total con 45 propuestas, "muy trabajadas" en las comisiones, y entre ellas algunas relativas a la reforma del Código Civil en materia de adquisición de la nacionalidad. "Queremos una ley amplia, generosa y sin marcos temporales para el acceso a la nacionalidad de los descendientes de españoles", remata.

En la apertura del pleno, que concluye hoy en Oviedo sus deliberaciones, se entregó ayer una distinción a la presidenta del Consejo de Comunidades Asturianas, María Antonia Fernández Felgueroso, que recibió una obra del colectivo artístico "Boa Mistura".

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