Barbón y Puig alertan ante las europeas: "La cabra tira al monte, quieren volver al austericidio"

El líder de la FSA y el expresidente valenciano defienden la progresividad tributaria y pasan factura al "dumping fiscal" de Díaz Ayuso

Adrián Barbón y Ximo Puig, durante la conferencia organizada por la Fundación José Barreiro en la Cámara de Comercio de Oviedo.

Adrián Barbón y Ximo Puig, durante la conferencia organizada por la Fundación José Barreiro en la Cámara de Comercio de Oviedo. / LNE

Defensa a ultranza de la progresividad fiscal, de que pague más impuestos el que más tiene, porque es un principio que marca la Constitución y, además, supone una herramienta para lograr la cohesión social. Fue el mensaje en el que insistieron, con una larga lista de argumentos, uno de los pocos "barones" territoriales que le quedan al PSOE, Adrián Barbón, y el que fuera uno de los más relevantes hasta las autonómicas de 2023, el valenciano Ximo Puig, ahora embajador de España ante la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos). Aunque la campaña de las europeas todavía queda muy lejos en España, por las citas autonómicas previas en el País Vasco y Cataluña, Barbón y Puig lanzaron un primer aviso de cara a esa cita con las urnas: "La cabra tira al monte, hay riesgo de volver a las políticas y austericidas". Y también pusieron el foco sobre la política fiscal de Isabel Díaz Ayuso, con la conclusión de que "las recetas" que aplica la Comunidad de Madrid, favorecida por su condición de capital, "no valen para otras autonomías".

La clausura del ciclo de conferencias "¿Para qué sirven mis impuestos?", coordinado por la ex consejera de Hacienda, Ana Cárcaba, a encargo de fundación José Barreiro, sirvió de promoción y alegato a favor de la "Vía fiscal asturiana" en medio de un mapa autonómico dominado por el PP. "Fiscalidad es civilidad, sin impuestos no hay democracia", proclamó de entrada Ximo Puig, quien destacó "los excelentes resultados de Asturias" en el informe Pisa de educación, que elabora precisamente la OCDE.

"Gracias a que pagamos impuestos se construye el Estado de Bienestar", sostuvo Barbón. El líder de la FSA apeló a los datos y las cifras para rebatir que los impuestos en Asturias sean una traba para el crecimiento económico. "Aquí el impuesto de Patrimonio lo paga quien tiene un millón de euros, y por esa cantidad para 298 euros al año. ¿De verdad alguien puede decir que es injusto? Que más quisiera yo que poder pagar esos 298 euros". Y para rematar esa parte del argumentario, añadió el presidente del Principado que "gracias a la recaudación de este impuesto, vamos a garantizar la gratuidad de ‘las escuelinas’ de 0-3 años a partir de septiembre". También quiso aclarar que "en Asturias las clases medias y trabajadoras no pagan el impuesto de sucesiones", para rematar con una consigna casi electoral: "Si no heredas más de 300.000 euros, no compres el recetario de la derecha tradicional".

Ximo Puig y Adrián Barbón también aprovecharon la oportunidad para lanzar una primera reflexión sobre la relevancia que tendrán las próximas elecciones europeas del 9 de junio, aunque la política española está ahora más pendiente de las elecciones vascas y catalanas, que tocan antes. Ambos recordaron las respuestas, diametralmente opuestas, que dio Europa ante la gran recesión económica (2010-2011) y más recientemente ante la pandemia. "El neoliberalismo fracasó en la crisis financiera a los ojos de todo el mundo. Pero aquel neoliberalismo ha mutado el populismo. Estas elecciones europeas son muy importantes porque el virus del populismo está arraigando con mentiras", afirmó Puig, quien coincidió con Barbón en el riesgo que entrañaría que, "si dan los números", conservadores y ultra derecha marquen el "norte político" de Europa. "La cabra tira al monte y se quiere volver a las políticas austericidas que tanto daño hicieron", señaló el ex presidente valenciano.

En una larga charla de política fiscal, el secretario general de la FSA no se privó de cuestionar una vez más el dumping fiscal "que practican algunas autonomías" y sostuvo que "todas las que han seguido el modelo de Madrid han perdido recaudación y muchos miles de habitantes, sin embargo Asturias y Castilla-La Mancha hemos ganado población y riqueza". Ximo Puig apostilló que el modelo de Madrid acaba generando desigualdad interna: "Es la autonomía con más renta per capita pero también es donde hay mas desigualdades y esas cosas tienen consecuencias".