Alu Ibérica reclama la condena de Domenech, Losada, Camacho y Magin por su quiebra

Los administradores concursales de la empresa Alu Ibérica Avl –la antigua fábrica de aluminio que vendió Alcoa a Parter Capital en agosto de 2019– reclaman a los responsables de su situación actual –sin actividad y sin dinero– 19,5 millones en concepto «de daños y perjuicios».

Asimismo, reclaman que el juez de lo Mercantil Número 1 de Oviedo –el encargado de vigilar el proceso de liquidación de la sociedad propietaria de la fábrica de San Balandrán– que inhabilite también a sus, todavía, propietarios.

Insisten en que esta «inhabilitación» tiene que ser como administradores «de bienes ajenos durante un período de quince años» así como de representantes de «cualquier persona durante el mismo período». Y esto es así porque los despachos de abogados de Miguel Gómez Gordillo y GdP Legal –los responsables de poner en orden en una empresa que produjo aluminio primario en Asturias desde mediados de los años cincuenta– consideran a Víctor Rubén Domenech –por otro nombre, David Domenech–, a su expareja, Alexandra Camacho, al «testaferro» Luis Losada, según la fiscalía de la Audiencia Nacional, y al hombre de Rüdiger Terhorst en Avilés, el alemán Joachim Magin.  

Windar Renovables, la multinacional de origen avilesino, es la única compañía que opta a hacerse con los terrenos de Alu Ibérica (antigua Alcoa). La otra sociedad oferente, Alueuropa, se ha retirado del concurso, según confirmaron distintas fuentes conocedoras de la operación. Esta compañía no presentó la documentación adicional reclamada por la administración concursal.

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