Gijón despide un multitudinario Antroxu: "Los Mazcaraos" se hacen con el concurso de charangas

La charanga que surgió durante la pandemia mantiene su idilio con el Antroxu. "Los Mazcaros" se han vuelto a imponer en el concurso de charangas, como ya lo hicieran el año pasado. El primer premio fue muy bien recibido entre los miembros de la agrupación, que ya desfila como una más para el velatorio de la sardina. La entrega de premios tuvo lugar en el paseo de Begoña, que estuvo abarrotado. En el concurso de charangas, en la categoría "A", la de camiones, se impuso el Club "Xente Xoven de Serín", que dedicó el galardón a "la zona rural".

Vídeo: Así celebró la charanga Los Mazcaraos su triunfo en el Antroxu de Gijón

El paseo de Begoña estaba expectante ya antes de las cinco de la tarde. La Sardina, de cuerpo presente. De fondo, una triste música. Aparecieron las clásicas plañideras, que no pudieron evitar el sollozo para anunciar el trágico fallecimiento de la querida "Turbu". Ni un enorme rollo de papel higiénico podía contener las lágrimas. Todos los antroxeros se fueron enterando a primera hora de hoy del trágico suceso. "Una vez finalizado el desfile y tras echar unos bailes en la verbena de Begoña, ‘Turbu’ fue de copas por los chigres. Estaba tomando algo en una terracina cuando una gaviota la confundió con un pincho y se la llevó volando. En el viaje la gaviota decidió soltarla en el agua, pero como hay tanta sequía no encontró agua y falleció. Dejó desolados a 'Mateo Sat' y a Alisio Parrochu, que por mucho que corrieron no pudieron alcanzar a la gaviota", desvelaron sus allegados tras la muerte de "Turbu".

Frente al escenario instalado en el paseo Begoña, cientos de personas, muchas de ellas disfrazadas, aguardan el momento de tener un último momento íntimo con la protagonista del Antroxu gijonés. Un velatorio para despedir a "Turbu", cuyas últimas palabras fueron "¡Sálvame, ven nadando a mí!". Hay expectación por conocer a los ganadores de los concursos (será a partir de las seis de la tarde) y por arropar a la sardina en su desfile fúnebre hasta la playa del marqués, donde se leerá su testamento.