Con el feminismo por bandera en Lugones

Las mujeres, solo por el hecho de serlo, sufren diversas formas de violencia por parte de sus parejas y entorno que pueden ir desde el control psicológico hasta la agresión física. Aunque a día de hoy existen leyes y herramientas para favorecer la erradicación de estas actuaciones denigrantes, aún queda mucho por hacer. Al menos así lo sostienen las mujeres que acudieron ayer por la tarde al acto institucional del 25M que se celebró en el Centro Polivalente Integrado de Lugones, organizado por el Gobierno del Principado de Asturias y que contó con las intervenciones del presidente, Adrián Barbón; el alcalde de Siero, Ángel García, y la presidenta del Instituto Asturiano de la Mujer, María Jesús Álvarez.

Una de las mujeres que asistió al acto es Pilar Ruiz, quien considera que, actualmente, "el panorama parece estar un poco estancado, a pesar de que se hicieron muchas cosas y se nos dan muchas más herramientas". "Poco a poco, se va progresando de manera paulatina en esta cuestión", afirmó.

Por su parte, Victoria C. considera que "estamos en una época muy dura, donde se ve una involución muy importante en relación a los derechos de las mujeres". "Estamos viviendo una regresión en el tiempo que nos está llevando a una situación en la que nuestros derechos están pendientes de un hilo", subrayó. Y es que esta sierense asegura que "como ya decía Simone de Beauvoir en su época, nada de lo conseguido garantiza que se siga manteniendo. Por tanto, hay que estar siempre alerta, porque tenemos mucho peligro de perder todos los derechos conseguidos hasta ahora, no solo aquí, sino en toda Europa y yo diría, incluso, que a nivel mundial".

Hay quien opina que la situación actual está marcada por la normalización por parte de los jóvenes de comportamientos violentos que ellos no consideran como tales. "Se nota mucho en su manera de hablar y actuar. Los chicos de entre 14 y 17 años de edad no ven que controlar el móvil de su pareja pueda ser violencia, ni ellas ven anormal que ellos lo hagan", señala Ruiz. Añade, además, que "aunque en casa, a través de los padres, es donde debería empezar la educación en la igualdad, creo que se debería insistir también mucho más desde los centros educativos".

Trinidad Gil y Emilia Álvarez coinciden en que "el problema está en un punto en el que está aceptado por casi todo el mundo, por todos los políticos. Algo que institucionalmente no se cuestiona". Sin embargo, creen que "aún existe una gran parte de la población que está anclada en el concepto de que las mujeres pueden tener menos derechos o ser consideradas inferiores".

Se trata de un concepto que María Garrido asegura que queda patente con los datos. "Aparentemente sí que parece que estamos más concienciados, pero las cifras siguen demostrando que no es así. Siguen en aumento los asesinatos, las denuncias, las llamadas al 016. Y en concreto algo que está aumentando mucho son las agresiones sexuales. Hay mucho conseguido, pero hay que seguir trabajando mucho en ello", concluye.