Investigación abierta

La policía tailandesa encuentra en el teléfono móvil de Daniel Sancho amenazas de muerte de su víctima

Los agentes avanzan que tendrán la investigación cerrada en tres semanas

Sale a la luz el último mensaje que Edwin Arrieta envió al móvil de Daniel Sancho

Europa Press

Adrián Foncillas

Edwin Arrieta amenazó a Daniel Sancho con matarle si terminaba la relación que mantenían, ha revelado uno de los líderes de la investigación a El Periódico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica. La amenaza está incluida en el intercambio de mensajes entre asesino confeso y víctima en el teléfono móvil del primero que está en poder de la comisaría de la isla de Koh Pangan. La prensa tailandesa, citando fuentes policiales, ya desveló que Arrieta había advertido a Sancho de que haría públicas fotos comprometedoras si cortaba la relación que habían empezado tras conocerse un año atrás en la red social Instagram. La insistencia en mantener sexo de Arrieta, según la declaración de Sancho, le hizo perder la cabeza y golpearle. 

La policía de la isla está ya convencida de que se trató de un asesinato premeditado“Al 100%”, han aclarado. Confían también en que el tribunal lo verá de la misma forma y aluden a la montaña de evidencias: las grabaciones de las cámaras, el tíquet de compra en la víspera del asesinato de guantes, material de limpieza y un cuchillo de grandes dimensiones. La ley concede a la policía 84 días tras la orden de prisión preventiva, emitida este lunes, pero los investigadores confían en que la habrán finiquitado en tres semanas.

Fase oral del juicio

Tras ello enviarán sus conclusiones a la Fiscalía y podrá empezar la fase oral del juicio. Supone un recorte sustancial de los plazos habituales en la justicia tailandesa pero desde la comisaría niegan que hayan redoblado los esfuerzos por la alarma social ni la repercusión mediática. “Es un asesinato, no tenemos uno aquí a diario”, ha explicado la fuente policial en condiciones de anonimato. 

La policía sigue examinando las grabaciones de las cámaras de la calle y espera los resultados de los análisis de ADN que se están realizando en Bangkok. Entre las pruebas figuran la sangre encontrada en el suelo de la habitación del hotel y la camiseta de la víctima. Su familia ya ha llegado a Tailandia y se le han practicado los análisis para cotejarlos con los del cirujano colombiano asesinado.