Un sobrino de Jhon Jairo Pérez admite que le mató: "Me atacó con un cuchillo"

El homicida, Julio Adrián J., antes de ir a prisión con su hermano Cristian, muestra su temor a las repercusiones en Colombia: "Correrá la sangre"

Julio Adrián J. y Cristian J.

Julio Adrián J. y Cristian J. / Luis Vega

Luis Ángel Vega

Luis Ángel Vega

Julio Adrián J., uno de los dos hermanos detenidos por la Policía Nacional en relación al crimen de Granda, en Siero, admitió este viernes haber matado a Jhon Jairo Pérez Chavarro el lunes 25 de marzo, en el curso de una discusión alimentada por el alcohol. "Él me atacó con un cuchillo", declaró ante la jueza sustituta del Juzgado número 1 de Siero, Clarisa González. La magistrada envió a Julio Adrián y a su hermano Cristian a prisión por un presunto delito de homicidio, a petición de la Fiscalía. La calificación puede cambiaren el futuro. Julio Adrián mostró su temor a que sus familiares sean represaliados en Colombia. "Correrá la sangre", vaticinó.

Julio Adrián y Cristian –que estuvieron asistidos en el Juzgado por el letrado José Manuel Fernández González– son hijos de la cuñada de Jhon Jairo, por tanto sobrinos políticos, y no cuñados del asesinado como había trascendido inicialmente. Según dijo Julio Adrián en su declaración –que se inició a mediodía día y duró una hora–, los hechos ocurrieron el pasado 25 de marzo, después de que él y Jhon Jairo terminasen su jornada laboral en una empresa de limpieza. Fueron al Minymas de Colloto a comprar cervezas y estuvieron bebiendo mucho, según el presunto homicida. Luego se fueron a la finca de Granda donde reside Julio Adrián, y siguieron bebiendo. Por allí apareció Cristian, que solo se habría tomado un par de cervezas.

Julio Adrián J., conducido a prisión. | Efe

Julio Adrián J., conducido a prisión. / Efe

Según dijo Julio Adrián, Jhon Jairo le propuso entonces irse al Model’s, un conocido prostíbulo. Julio Adrián repuso: "Un poco de respeto por mi tía". Julio Adrián añadió que Jhon Jairo se puso pesado, por lo que le pidió que se marchase. Bajaron por las escaleras a la zona de la parrilla de la finca, donde tenían aparcada la furgoneta, y entonces Jhon Jairo –siempre según su declaración– le espetó: "Tu tía es una puta y tu madre también". Jhon Jairo le habría dicho también que había sido él quien había contratado a unos sicarios para dar una paliza a su madre, y entonces cogió un cuchillo que había en la parrilla. Julio Adrián dijo a la jueza que Jhon Jairo le acometió y le pinchó en el brazo, cortándole el jersey. Cuando levantaba el cuchillo para apuñalarlo, dijo, hubo un forcejeo en el que se cegó y no sabe qué ocurrió. Cuando quiso darse cuenta, Jhon Jairo estaba en el suelo, muerto. Dejó primero el cuerpo escondido bajo un toldo y luego lo enterró. La Policía encontraría el cadáver este miércoles.

Cristian J., camino del Juzgado. | Efe

Cristian J., camino del Juzgado. | Efe

Cristian, que declaró a la una de la tarde durante una media hora, admitió haber estado ese día en la finca, pero negó haber participado en el altercado. "Fui porque sé que mi hermano bebe y no quería que faltase al trabajo al día siguiente. Tomé algo y me marché", declaró. Los hermanos dijeron que no tenían ningún problema con Jhon Jairo, que de hecho estaba empadronado en casa de Julio Adrián y al que habían metido en la empresa de limpieza.

Aunque había trascendido como origen del crimen una pelea en Colombia en la que el suegro de Jhon Jairo habría sido agredido, el motivo real sería un problema entre la madre y la tía de los detenidos y los hijos de Jhon Jairo en Colombia. El asesinado tenía cuatro hijos en el país sudamericano, tres de su primer mujer y una bebé de su tercera esposa, y una quinta en España, de su segunda mujer. Los dos hermanos partieron a prisión a las tres de la tarde. En el exterior de los Juzgados se dejó ver, muy afectada, la mujer de Julio Adrián, Franci, también detenida este miércoles, y luego liberada.