Tomé lamenta el "desinterés" del PSOE por negociar con ella la investidura

"El juego de los interlocutores" está retrasando las reuniones para formar el próximo Gobierno de Asturias y esa demora le huele a Covadonga Tomé a un cálculo político interesado. La diputada de Podemos percibe en el PSOE "un cierto desinterés por conversar" con ella y observa una voluntad mucho más decidida por cambiar su voto por el del único parlamentario de Foro, Adrián Pumares. Después del intercambio de tuits que mantuvo el miércoles con los responsables socialistas, y de la discusión sobre si la interlocutora natural debe ser ella o la dirección interina de su partido, Tomé urgió ayer al PSOE a fijar "cuanto antes la reunión entre quien va a representar a Podemos en las instituciones y quien va a optar a presidir el Principado". El mensaje va acompañado de otro emplazamiento para que Adrián Barbón decida "con seriedad y rigor" "si va a pactar con los socios de Vox en Gijón –Foro– o se va a sentar con las fuerzas progresistas".

"Desconozco", remata Tomé, "por qué en Asturias se insiste en avanzar en las conversaciones con Foro y se trata de sacar de la ecuación a Podemos…" Todo esto trae causa de la reunión del PSOE con la dirección interina de la formación morada en Asturias a la que, según la número dos de los socialistas asturianos, Gimena Llamedo, "Covadonga Tomé decidió no asistir", y de la duplicidad de equipos negociadores por el conflicto interno en Podemos.

No es ella quién para decirle a otros con quién tienen que hablar, sigue Tomé, pero ellos "saben perfectamente cuál es su interlocutor natural", avanza sin necesidad de mencionar que es ella quien debe apretar el botón del voto en la investidura.

En esta batalla de Podemos por la silla de las reuniones volvió a entrar ayer Llamedo pidiendo a Podemos que no convierta la negociación de la investidura en un vodevil y evite proyectar "una imagen que está a años luz de la que necesitan los asturianos". La número dos de la FSA manifestó su respeto por las decisiones de otras formaciones, incluida la designación de los equipos negociadores, y añadió que "los problemas internos de los partidos no pueden interferir en la gobernabilidad de Asturias".

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