El Principado cuestiona el fondo extra de financiación que piden el sur y el levante

El Gobierno del Principado cuestiona la conveniencia del fondo de compensación transitorio que piden al Estado algunas de las autonomías de la mitad sur y la franja levantina que se consideran "infrafinanciadas" y particularmente maltratadas por el actual modelo de financiación autonómica. A raíz de la causa común que con este propósito hicieron los gobiernos de Castilla-La Mancha, Andalucía, Valencia y Murcia, el consejero de Hacienda y portavoz del Ejecutivo, Guillermo Peláez, salió ayer a deshacer el concepto mismo de las supuestas carencias que esgrimen unas autonomías que "tratan de hacer pasar su deuda por infrafinanciación", afirma. Peláez identifica aquí "un concepto del que debemos huir" mediante el subrayado de que "el hecho de que una comunidad autónoma esté endeudada nada tiene que ver con que esté infrafinanciada. No debemos entrar en ese debate".

Es su respuesta para la actitud de estos gobiernos y también para el PP, que "nos insinuó que pidiéramos un fondo similar también para Asturias" en una estrategia que no considera "acorde con los intereses" de la región. La acometida del sur y el levante, de tres gobiernos del PP y el socialista de Castilla-La Mancha, trajo causa, a finales de enero, de una sugerencia que en realidad hizo la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) con base en unos cálculos que sitúan la financiación de esas cuatro autonomías por debajo de la media del sistema. Se planteaba como un fondo de nivelación hasta la próxima y muy demandada reforma del modelo de reparto y rondaría en total los 3.000 millones de euros.

Pero a Asturias no le gusta, y tampoco el Ministerio se lo ha tomado con mucho interés. Peláez rechaza las reivindicaciones de la entente suroriental y las usa de paso para reclamar del PP "más responsabilidad con financiación autonómica y que sean responsables a la hora de defender los intereses" de la región. Sucede además que en esa lista de gobiernos hay uno, el de Castilla-La Mancha, que comparte el color político del Principado y compartió en el pasado la última alianza de autonomías con intereses comunes en la que estaba Asturias. El Ejecutivo manchego de Emiliano García-Page firmó en noviembre de 2021 la "declaración de Santiago" con regiones que tienen planteamientos sobre el nuevo modelo opuestos a los de sus nuevos aliados. Además de Asturias, estaban Galicia, Cantabria, Castilla y León, Aragón, la Rioja y Extremadura, y van a seguir estando. Con base en sus "conversaciones informales", Peláez dio por hecho ayer la continuidad de la alianza de cara al nuevo intento de reforma del sistema –la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, anticipó los contactos para este febrero, pero aún no hay fecha concreta– a pesar de la posición manchega y el giro político que dieron en mayo algunos de estos gobiernos.

Lo que Castilla-La Mancha está reivindicando, precisa el Consejero, rige sólo para el corto plazo. "Es un fondo extraordinario para atender a sus necesidades actuales inmediatas, pero no pone en tela de juicio ni se sale de la ‘Declaración de Santiago’. Me consta que sigue reivindicando que el modelo sea el que reclamamos desde Asturias, uno que atienda al coste real de la prestación de los servicios públicos".

"El PP resta 29 millones"

Las reconvenciones del consejero al PP no se detuvieron ayer ahí. Tras la reunión semanal del Consejo de Gobierno, el titular de Hacienda lamentó que los votos de la mayoría absoluta popular hayan tumbado en el Senado los objetivos de estabilidad presupuestaria para las administraciones públicas y, con ellos, el margen de déficit del 0,1 por ciento para las autonomías, que traducido a euros "detrae a Asturias 29 millones de euros ya incluidos en el presupuesto". "Es probable que si Asturias no puede contar con estas cantidades tengamos que hacer recortes", advirtió Peláez.

Aún queda una oportunidad, dado que según la ley el Gobierno debe volver a someter su proyecto a la consideración de la Cámara Alta en el plazo máximo de un mes, pero de entrada el Consejero se preocupa, dice, "porque la fortaleza que tiene el Principado en la negociación del nuevo sistema de financiación está en la unidad de acción externa, con los territorios que comparten sus intereses, y también en la interna, en la declaración que firmaron todas las fuerzas políticas en la legislatura pasada". Ahora, la actitud del PP "nos hace dudar" de si los populares s mantienen en la alianza política para la reforma del sistema de financiación, remata.

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